El déficit público creció un 29,4% el año pasado
El déficit público de la Administración central del Estado, incluidos organismos autónomos y Seguridad Social, ascendió el pasado año a 1.641.657 millones de pesetas, cantidad que representa un aumento del 29,4% sobre 1984. El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, declaró ayer, al presentar el balance provisional de las cuentas del Estado, que el aumento del déficit hasta un 5,81% del producto interior bruto (PIB) supone "una desviación sobre los propósitos iniciales".
Portavoces del Ministerio de Economía mostraron ayer su satisfacción por la buena marcha económica del país. "La única preocupación es el déficit, dijeron, aunque el Gobierno mantiene su objetivo de reducirlo a final de año a un 4,57 del PIB. Las previsiones sobre el índice de precios al consumo en el mes de marzo son también positivas y se espera una subida del "0,5% o inferior".A pesar del aumento de 372.65 millones de pesetas que ofrece el balance presentado ayer por Carlos Solchaga, el déficit global de todas las administraciones públicas se desconoce, porque el Gobierno aún no dispone de los datos correspondientes a comunidades autónomas y ayuntamientos. El ministro afirmó que esta falta de información sobre las cuentas de las administraciones autonómicas y locales no tiene por qué condicionar el nuevo esquema de financiación que se está negociando.
El aumento del déficit de las administraciones centrales públicas se debe en buena parte, según el Gobierno, a la reducción de los tipos en el impuesto sobre la renta. Esta decisión, adoptada en abril del pasado año, permitió que los españoles mejoraran su poder adquisitivo en 100.000 millones de pesetas y sirvió para reactivar el consumo privado, que creció un 1,5%, dato que contrasta con el descenso del 0,8% que había experimentado en 1984.
El déficit de la Seguridad Social se elevó hasta 114.589 millones de pesetas, una cantidad que es 4,63 veces superior a la de un año antes. Aunque el ministro de Economía manifestó que no se va a revisar la reforma de las pensiones, el Estado tendrá que aumentar su aportación adicional para el mantenimiento del sistema.
La carga de los intereses de la deuda financiera contraída por el Estado ascendió en 1985 a 785.500 millones de pesetas, casi el doble que en 1984. El ministró afirmó que se reducirá drásticamente este año, aunque reconoció que a cambio se recurrirá más al Banco de España para cubrir las necesidades financieras del Estado.
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