Clausurado en Creteil el Festival Internacional del Filme de Mujeres
La octava edición del Festival Internacional del Filme de Mujeres que se inauguró en Creteil (una ciudad próxima a París) el pasado 14 de marzo terminó la noche del domingo con el triunfo de El contacto, de la polaca Magdalena Lazarkiewicz, La hora de las estrellas, de la brasileña Suzana Amaral, Un poco tú, un poco yo, de la húngara Lidia Gyarmathy y Anne Trister, de la cineasta francófona canadiense Léa Pool, que fueron reconocidos como los mejores por los diversos jurados encargados de elaborar el palmarés.El festival de Creteil es, salvo un ensayo realizado en Montreal el año pasado, único en su género en el mundo. En pocos años se ha convertido en el tercer festival de Francia tanto por su calidad como, cabe subrayarlo por lo excepcional, por su organización impecable. El festival debutó con un filme de la realizadora estadounidense Dorothy Arzner: Dance girl, dance (RKO), 1940, donde actúan Maureen O'Hara y Lucille Ball; posteriormente fue presentado el trabajo cinematográfico de esta directora, a cargo de Pascal Merigeau y Alain Carrel delante de un público muy numeroso.
Homenajes
La apertura del festival fue un homenaje a Dorothy Arzner, nacida en San Francisco el 3 de enero de 1900 y muerta en Quinta (California) el 1 del octubre de 1979. Esta realizadora, que comienza su carrera como secretaria, pasando a guionista en un estudio de Hollywood, sube todos los peldaños hasta llegar a ser en los años treinta una de los 10 mejores directores de Hollywood al lado de Cukor, Lubitsch, etcétera. Es ella quien da por primera vez papeles de primera importancia a Catherine Hepburn, Joan Crawford, Rosalind Russell y otras actrices de renombre.La retrospectiva de la realizadora sueca Mai Zetterling constituyó otra de las secciones más atrayentes del festival de Creteil. Nacida en 1925, Zetterling comenzó su carrera en el. teatro a los 16 años. Poco después empieza su carrera cinematográfica con Alf Sjoberg sobre un guión de Ingmar Bergman, Tormentos, y más tarde actuará en Música en las tinieblas, también de Bergman. Más tarde pasó a dirigir filmes.
El festival fue creado para potenciar un cine de autor prácticamente ignorado hace sólo unos años: el cine de autora. Las cosas han cambiado: el León de Oro de Venecia ganado por Agnès Varda y varios Césares obtenidos por Coline Serrau lo prueban. Por esta razón, aunque los filmes del concurso siguen siendo estrictamente de autora, este año han sido admitidos filmes realizados por hombres: una nueva sección, el Autorretrato de una actriz: este año se trata de Bulle Ogier, quien eligió ella misma 10 de sus filmes, todos dirigidos por hombres, que fueron proyectados durante el festival.
El lunes por la noche se realizó un homenaje a Bulle Ogier en su presencia con la proyección de Les idoles, 1968. Otra sección estuvo dedicada a diez realizadoras francesas, cada una de las cuales presentó sus películas ya distribuidas. Entre ellas: Agnès Varda y Margueritte Duras.
