Reagan acusa al Gobierno de promover el fraude electoral

El presidente norteamericano, Ronald Reagan, denunció ayer el "fraude y la violencia" electorales perpetrados en Filipinas, "en gran parte" por el régimen del presidente Ferdinand Marcos y formuló un llamamiento a los filipinos para que eviten el desorden.

En una declaración escrita dada a conocer poco después de que Marcos hubiese sido proclamado nuevo presidente por el Parlamento, Reagan señala que "ya se ha convertido en algo evidente, por desgracia, que las elecciones han sido mancilladas por un amplio fraude y por la violencia perpetrada en gran parte por el partido en el poder".

"Esto ha sido tan grave", prosigue Reagan en la declaración, "que la credibilidad de las elecciones ha sido puesta en cuestión tanto en Filipinas como en Estados Unidos".

"En este momento difícil", continúa, "es imperativo que todos los filipinos responsables busquen los medios pacíficos para asegurar la estabilidad de su sociedad y evitar la violencia, que no favorecería más que a los que tratan de poner fin a la dernocracia".

Al mismo tiempo, Philip Habib, enviado especial de Reagan, llegaba anoche a Manila, a bordo de un avión militar estadounidense, con la difícil misión de intentar una mediación entre Marcos y la líder de la oposición, Cory Aquino, si bien, más que a negociar, Habib llega a Manila para calibrar la situación. La misión de Habib tiene como principal objetivo garantizar la permanencia de las bases militares de EE UU en Filipinas, la aérea de Clarq y la naval de Subic.

Habib se reunirá tanto con Marcos como con Aquino, así como con responsables de la Iglesia, de los militares y con distintos representantes de los medios financieros.