El Gobierno reduce la morosidad empresarial a la Seguridad Social en más de 300.000 millones

La morosidad acumulada de las empresas privadas y públicas de Barcelona a la Seguridad Social ha quedado reducida en 158.000 millones de pesetas tras la depuración efectuada por el Ministerio de Trabajo durante el pasado ejercicio. Expertos en Seguridad Social, que han realizado una proyección a escala estatal, cifran en más de 300.000 millones de pesetas la deuda, teniendo en cuenta que sólo la de Barcelona representaba en abril de 1984 el 40% del conjunto total de España.

Las cifras, según fuentes solventes, han quedado redondeadas por provincias entre los meses de noviembre y diciembre y en ellas destaca el notable porcentaje de deuda a la Seguridad Social que mantiene la propia Administración local y las empresas públicas. El ministro Joaquín Almunia presentará próximamente los resultados y los métodos de la depuración a la comisión de asuntos sociales del Congreso de Diputados.La operación de depuración de la deuda de la Seguridad Social fue uno de los objetivos adoptados por el Ministerio de Trabajo en octubre del pasado año. El plan de saneamiento se originó por la situación deficitaria de la Seguridad Social española, cuya crisis motivó en gran parte, primero, las reformas de prestaciones sociales y, después, el trasvase del déficit a la red hospitalaria pública que, en Cataluña y en otras comunidades, ha alcanzado recientemente situaciones muy delicadas para los hospitales concertados.

Entre los objetivos del plan de depuración se encontraba también la reducción de la morosidad por debajo del 10% de las recaudaciones de cuotas empresariales. Para ello se inició la apertura de oficinas de seguimiento de los contribuyentes, con la finalidad de disminuir el porcentaje de cuotas dejadas de cobrar. Paralelamente, se puso en funcionamiento un período de investigación dirigido a evaluar las cifras reales de la morosidad acumulada que, en abril de 1984, superaba oficialmente, por primera vez, el billón de pesetas. Sin embargo, la deuda viva nunca llegó a saberse con exactitud, debido en gran parte a situaciones que rozaban el caos en muchas tesorerías provinciales y magistraturas de Trabajo de ejecuciones gubernativas, encargadas de la vía de apremio. Las últimas cifras barajadas sobre la morosidad alcanzaban ya 1,2 billones de pesetas.

Confusión de cifras

La confusión de las cifras se debía tanto a duplicidades derivadas de la informatización del pago de cuotas como a la cada vez más numerosa contabilización, dentro de la deuda, de impagados correspondientes a empresas desaparecidas cuyo cobro era imposible. Se daban también otras situaciones, ya de orden penal, en las que, como en el caso de Barcelona, habían existido situaciones de presunta falsedad documental que partían de la propia Tesorería y por las que se encuentran actualmente procesados dos inspectores de Trabajo y un funcionario, además de una cincuentena de empresarios e intermediarios.Las tareas de investigación para depurar la deuda real han sido llevadas a cabo en todas las tesorerías provinciales durante el año 1985. Fuentes del Ministerio confirmaron a este diario que la depuración ha sido dada por finalizada, aunque no quisieron precisar todavía los métodos utilizados para dar por extinguida parte de la deuda y delimitar unos expedientes de otros hasta que los resultados oficiales sean comunicados al Congreso de los Diputados. No obstante, este diario ha podido comprobar que, por ejemplo, en el caso de Barcelona, la parte de la deuda depurada asciende a la cifra de 158.434 millones de pesetas.

De este modo, la Tesorería de la Seguridad Social ha eliminado un total de 136.090 certificaciones de descubierto extendidas a empresas con sede en Barcelona, cuyas deudas estaban en trámite de embargo gubernativo. La mayoría de los apremios eliminados -159.710- corresponden a la Magistratura de Trabajo, mientras que otros 34.989 habían sido encomendados en vía ejecutiva a la delegación de Hacienda provincial.

Tras la depuración, la deuda de las empresas de Barcelona ha sido reducida de 414.882 millones de pesetas contabilizados a primeros de noviembre a 277.536 millones de pesetas el 30 de noviembre, lo que significa una reducción de aproximadamente un 30%.