La Corporación propone a la Comunidad subir las tarifas de los taxis en un 8,58%

El Ayuntamiento de Madrid acordó ayer, en el curso de un pleno ordinario, informar favorablemente a la Comunidad de Madrid sobre la modificación de tarifas de los taxis en un porcentaje de aumento del 8,58%. Esta propuesta será estudiada por la co misión de precios la próxima semana. En el pleno se abrió un debate sobre la postura institucional ante el referéndum sobre la OTAN que terminó cuando el alcalde, Juan Barranco, aseguró que el comportamiento del Ayuntamiento será de total neutralidad.

La corporación aprobó ayer sin discusión la modificación de las tarifas de los taxis que será enviada urgentemente a la Comisión de Precios de la Comunidad de Madrid. Previsiblemente esta comisión se reunirá la próxima semana, y, en caso de aprobar la propuesta municipal, los taxistas aplicarían la subida del 8,58% inmediatamente. La bajada de bandera pasaría así de 65 a 80 pesetas; el kilómetro recorrido, de 36 a 38 pesetas, y la hora parada, de 925 a 935 pesetas, quedando igual los suplementos.Posteriormente y tras dar a una calle del distrito de Hortaleza el nombre del escultor Pablo Serrano y a otra del distrito de Charnartín, el de Pastora Imperio, se inició un debate a raíz de que el Grupo Popular, a través de su concejal José Ignacio Wert, hiciera una propuesta para pedir una postura neutral ante el referéndum sobre la OTAN.

Tras la lectura de la propuesta, el portavoz del PCE, Francisco Herrera, manifestó que "el Ayuntamiento, al igual que otras instituciones, debe estimular el -voto de los madrileños", en tanto que Adolfo Pastor, portavoz de la Mesa para la Unidad de los Comunistas, afirmó que "institucionalmente no se debe pronunciar la Corporación, aunque no es posible evitar que los concejales hagan campaña en una u otra dirección".

Emilio García Horcajo, como nuevo portavoz del Grupo Socialista, manifestó que "el Ayuntamiento tiene que tener una estricta y escrupulosa neutralidad", y acusó al Grupo Popular de hacer una propuesta en la que, bajo un enunciado de neutralidad, se intentaba que desde el Ayuntamiento se pusieran trabas a los que quieran votar.

Por último, Juan Barranco aseguró ayer a la oposición: "El comportamiento del Ayuntamiento de Madrid sobre el tema de la OTAN será de absoluta neutralidad. Adoptaremos la misma postura que en otras consultas por razones de principio".

Previamente, la Corporación conoció los nombramientos de Emilio García Horcacajo, Enrique Moral, Jesús Espelosín y Adolfo Pastor como primer, segundo, tercer y cuarto teniente de alcalde, respectivamente, y discutió la política de concesión de terrenos gratuitos a cooperativas de viviendas durante 75 años. Enrique Villoría, en nombre del Grupo Popular, criticó la política de -concesión a cooperativas compuestas por familias que tienen unos ingresos entre tres y 3,5 veces el salario medio interprofesional.

Jesús Espelosín, concejal de Urbanismo e Infraestructuras Básicas, manifestó que de ofrecer terreno a familias con unos ingresos menores a 2,5 veces el salario mínimo el proyecto fracasaría.

La oposición ayer no consiguió que ninguna de sus propuestas fuera aceptada. Enrique Moral, concejal de cultura, reconoció que de las 231 plazas existentes en los internados de San Ildefonso (Madrid), La Paloma (Cercedilla), Palacio Valdés (Tres Cantos) y Alcalá, 46 están sin ocupar, en tanto la Comunidad de Madrid tiene libres otras 119 de las 1.588 plazas que posee.

Moral manifestó que, a pesar de ello, sólo se habían admitido 17 de las 96 instancias recibidas porque así lo habían decidido las comisiones correspondientes con un criterio profesional.

Críticas al convenio

Una nueva discusión se produjo con motivo de la aprobación del convenio. El texto firmado el pasado jueves fue considerado malo por Adolfo Pastor "por suponer realmente un aumento medio del 6,34%". Herrera manifestó que las centrales sindicales habían tenido que firmar "a la trágala" con el fin de estar presentes en la comisión que discutirá las modificaciones de retribución y horario, y Alberto Ruiz Gallardón manifestó, en nombre del Grupo Popular, que la oposición había estado marginada, y calificaron de "coacción laboral" la forma como se había tramitado el convenio.José María de la Riva, concejal de régimen interior y personal, afirmó que había que felicitarse por la firma de todos los sindicatos y aseguró que el convenio tiene importantes ventajas sociales.

Por último se trató el tema de Araceli Heredia, de raza gitana, funcionaria del Instituto Municipal de Deportes (IMD) que fue trasladada del polideportivo de San Juan Bautista al de san Cristóbal de los Ángeles en lo que entonces calificó el comité de empresa como un caso de racismo.

La concejala Esperanza Aguirre acusó a Moral de no decir la verdad cuando a finales de noviembre afirmó que Comisiones Obreras había retirado la denuncia que se puso por este motivo, pues este sindicato la mantiene.

Asimismo acusó de coacción a la dirección del IMd por los expedientes sancionadores abiertos a los miembros del comité de empresa que denunciaron el hecho.

Moral manifestó que el traslado se había producido por cautela tras recibir dos escritos judiciales sobre la citada funcionaria, que trabajaba en taquillas, en los que, según explicó el concejal acabado el pleno, el juez ordenaba la retención de una parte del sueldo de la funcionaria por impago de unas facturas.