Solchaga revela en las Cortes que 1.101 'ricos' pagan menos que antes de 1978

El Congreso rechazó ayer, con los votos socialistas y el apoyo del PCE, las enmiendas presentadas por el Grupo Popular y los diputados centristas a todo el proyecto de ley de Reforma sobre el Impuesto sobre la Renta. Para avalar la necesidad de corregir las dericiencias del tributo, el ministro de Hacienda, Carlos Solchaga, reveló que 1.101 de los contribuyentes más ricos pagan la cuarta parte de lo que les correspondería abonar sin la reforma fiscal de 1978.

En nombre del Gobierno, el ministro dijo que "por encima de otros motivos económicos que lo justificarían", el proyecto busca un reparto más justo de la carga, así como terminar con los paraísos fiscales. Solchaga subrayó que, pese al retroceso de los salarios en la distribución de la renta (han bajado en los cinco últimos años del 63,9% al 58,7%), su aportación al impuesto ha crecido del 81,9% al 83,94% de los ingresos totales.Desde la opinión de que la reforma de 1978 ha tenido aspectos positivos y negativos, Solchaga centró la finalidad del proyecto en atajar estos últimos. Más concreto que en anteriores comparecencias públicas sobre el asunto, reveló que, gracias a la posibilidad de deducir sin límite las reducciones de patrimonio, 1.101 contribuyentes se aplicaron el último año del que se conocen datos (ejercicio 1983, declarado en 1984) una deducción media de 24,9 míllones. Así, pagaron en promedio 775.000 pesetas, la cuarta parte de lo que les habría correspondido entregar en 1978 sin la reforma del impuesto (3.104.000 pesetas).

Entre esos 1.101 contribuyentes reunieron minusvalías por 27.000 millones de pesetas. El conjunto de las disminuciones de patrimonio declaradas por 1983 asciende a 120.000 millones, el triple que los incrementos de patrimonio o plusvalías.

La mayor parte de las personas con la fortuna necesaria para poder declarar que han perdido al año un promedio de 25 millones de pesetas recibieron importantes devoluciones del fisco, en algún caso de hasta 27,1 millones de pesetas. Hacienda devolvió más de un millón a 1.450 personas, que habían solicitado por término medio 2,3 millones. A 918 contribuyentes el trato fiscal de las minusvalías y plusvalías les permitió declarar cero pesetas de cuota líquída. No pagaron ni una peseta 375 personas que declararon ingresos de hasta 10 millones de pesetas, ni otras 515 con rentas de 10 a 100 millones; y 28 con ingresos superiores a los 100 millones. Varios contribuyentes con 200 millones de ingresos y patrimonio superior a los 3.000 millones se beneficiaron de 20 millones de devolución.

Acción contra el fraude

Aunque abundó en otros datos ya conocidos para defender esta reforma de la reforma, el ministro trató de anticiparse a las críticas de la oposición y dijo que el Gobierno socialista no ha estado inerme ante el fraude fiscal y ha multiplicado por cinco los terminales informáticos de Hacienda.

Las escuetas referencias de Solchaga a las reducciones de tarifa no fueron ampliadas por el Grupo Popular ni por el Centrista al defender sus respectivas solicitudes de devolución del proyecto al Gobierno. Por boca de José María Aznar y de Luis Ortiz, respectivamente, ambos criticaron todas y cada una de las demás modificaciones propuestas.

El diputado comunista Fernando Pérez Royo se manifestó sustancialmente de acuerdo con la mayoría de los cambios, aunque dijo que tienen alcance limitado. El diputado de la Minoría Catalana Carlos Gasoliba pidió más incentivos a la inversión, la declaración por separado para los matrimonios y la irretroactividad de la limitación para minusvalías y plusvalías.