España tendrá tres canales privados de televisión, según el proyecto que elabora el Gobierno

El Gobierno tiene intención de autorizar la concesión a empresas privadas de tres canales de televisión de alcance nacional, según manifestó ayer a EL PAÍS una fuente gubernamental relacionada con la elaboración del proyecto de ley que regulará la creación y funcionamiento de las televisiones privadas. El documento será estudiado previsiblemente por el Consejo de Ministros y remitido al Parlamento antes de que termine el año. Desde la publicación de la ley en el Boletín Oficial del Estado hasta la puesta en marcha de la primera emisora privada de televisión pasará algo más de un año, según los cálculos de los técnicos consultados por el Gobierno.

El proyecto elaborado por los expertos gubernamentales propone el funcionamiento de tres canales de televisión privada junto a los dos ya existentes de Televisión Española y al de las comunidades autónomas.A este respecto, fuentes gubernamentales consideran improbable que en el plazo de los tres próximos años se inauguren nuevos canales autonómicos. El Gobierno considera que por razones políticas debe descartar la creación de nuevos canales de televisión en comunidades autónomas, puesto que las prioridades inversoras deben ser otras, y no prevé la concesión de canales regionales a empresas privadas, dado el riesgo que representaría de reinos de taifas y de competitividad "insoportable" para la prensa local, según las fuentes gubernamentales.

El proyecto sobre el que trabaja Presidencia del Gobierno parte de la distinción entre las empresas responsables de la red de transmisión, las especializadas en la elaboración de programas televisivos y las dedicadas a la emisión, conforme al modelo norteamericano. Una de las cuestiones pendientes de decidir está relacionada precisamente con el modelo de la sociedad encargada de la explotación de la infraestructura de comunicaciones. Las dos opciones en estudio coinciden en desgajar del Ente Público RTVE la red de repetidores. La diferencia estriba en la alternativa de constituir una sociedad anónima de titularidad pública o una sociedad con mayoría de capital público pero con una reserva del 49% a empresas privadas. En esta segunda fórmula se da por segura una importante participación de la Compañía Telefónica.

Producción propia

El borrador ultimado por los servicios de la Presidencia propone que el porcentaje mínimo de producción propia de las emisoras privadas sea de un 30% a un 45% de sus programas; y sugiere, asimismo, el establecimiento de un tope de 10 minutos de espacios publicitarios por cada hora de emisión.Entre los requisitos para acceder a la concesión de una canal privado figura, en el proyecto gubernamental, que los solicitantes sean personas físicas o jurídicas españolas, lo cual implica en el caso de las empresas que su capital sea íntegramente español. Igualmente, el documento exige a los solicitantes informes que acrediten su solvencia económica.

Según fuentes gubernamentales, el riesgo de monopolio queda evitado desde el momento en que ninguna empresa puede, actualmente, acometer por sí sola la puesta en ( funcionamiento de un canal privado de televisión de alcance nacional, como de hecho ha probado la asociación de las diversas empresas de medios de comunicación dispuestas a formalizar la solicitud de un canal de televisión.

Los expertos relacionados con la elaboración del proyecto de ley, que será tramitado en el Parlamento como ley orgánica, advierten que la instalación de cable de fibra óptica en varias de las principales capitales españolas facilitará la transmisión de televisión por cable.

A este respecto, fuentes políticas precisaron que la limitación de concesión de canales nacionales no incluye a esta modalidad de televisión, e incluso el Gobierno cuenta con recibir peticiones para emisoras dedicadas exclusivamente a espacios deportivos, videoclips o películas, y cuya autorización no parece que vaya a ser difícil.

En cuanto a la construcción de la infraestructura tecnológica, la Compañía Telefónica iniciará próximamente la instalación de un cable de fibra óptica a lo largo del eje Plaza de Castilla-Atocha, y que permitirá simultanear líneas telefónicas, trasmisión de televisión por cable, videotexto, teletexto y proceso de datos, entre otros sistemas.

Barón coincide

Antes de que termine el próximo mes de diciembre, una comisión de expertos, representantes de la Presidencia del Gobierno, de los ministerios de Trasportes y de Defensa, así como de la Compañía Telefónica entregará al Gobierno un informe sobre los aspectos económicos, jurídicos y tecnológicos que España debe tener en cuenta para decidir el lanzamiento de un satélite propio de telecomunicaciones, o la asociación con otros países. La conexión con un satélite representaría la posibilidad de establecer más canales de televisión.El ex ministro de Trasportes Enrique Barón manifestó ayer en relación con el anuncio de su sucesor, Abel Caballero, de retirar el borrador de ley de Ordenación de las Comunicaciones, lo siguiente: "No tengo intención de hacer valoraciones sobre las decisiones de mi sucesor, especialmente cuando coincido con muchas de ellas. En cuanto a la reconsideración de la LOC, tal y como se ha presentado no hay un cambio sustancial en los objetivos ni en la filosofía, aunque sí en el método".