Hassan II libera a 33 presos cristianos, entre ellos 9 españoles

Nueve presos de delito común españoles que se encontraban prisioneros en cárceles marroquíes fueron puestos en libertad ayer en virtud de una amnistía decretada por el rey Hassan II en favor de todos los prisioneros cristianos, promulgada con motivo de la visita a Marruecos el 19 de agosto del papa Juan Pablo II.En total fueron liberados 33 presos: 14 franceses, cinco italianos, tres británicos, un chileno y un norteamericano, además de los nueve españoles. Según las autoridades españolas, sólo queda un preso español en Marruecos, en la cárcel de El Aaiun.

Tres de estos prisioneros, José Palau, Ramón Gallego y Antonio Ortiz, desertaron de la Legión española en 1972 y entraron en Marruecos, donde fueron arrestados y acusados del asesinato de un matrimonio de turistas suizos. Los tres se encontraban, aparentemente drogados cuando cometieron el crimen que se les imputó. Fueron condenados a perpetuidad.

José Palau ha hecho el bachiller en prisión y se encontraba actualmente en segundo curso de Derecho, que estudiaba a través de la Universidad a Distancia. Los dos primeros se encontraban en la cárcel de Tánger.

En la cárcel de Tetuán se encontraban Serafín Lorenzo Moreno, acusado de consumo de droga; José Badía Pérez, que fue condenado a un año de prisión y multa de 12.000 dirhams (unas 200.000 pesetas) en junio de este año, y Antonio Martín Heredia, condenado a dos años de prisión en diciembre de 1984 por tráfico de drogas.

Los tres fueron conducidos ayer a la frontera española de Ceuta, mientras que los que se encontraban en Tánger fueron puestos a bordo del ferry Tánger-Algeciras.

En la cárcel de Kenitra se encontraba Juan Albasoro, condenado en diciembre de 1984 a tres años de prisión, y en la de Casablanca, Felipe de los Santos, todavía en prisión preventiva desde julio de este año, acusado de "robo cualificado" de una motocicleta. Éste es el único de los nueve prisioneros españoles a quien no se aplica el decreto de expulsión que pesa sobre los otros ocho, porque su madre es marroquí. Vive en Casablanca, salió el sábado de prisión y se ha reintegrado a su casa en esa ciudad.

En la cárcel de Tánger se encontraba también Francisco Martín Fernández, condenado en mayo de este año a seis meses de prisión y multa de unas 70.000 pesetas (4.000 dirhams) por delito de contrabando.