Los bancos necesitan 81.000 millones para complemento de jubilación, sin incluir los efectos de la nueva ley

Los ocho grandes bancos nacionales necesitarán tener a finales de año unos fondos de 81.000 millones de pesetas para hacer frente a sus compromisos de complemento de jubilación, sin incluir los efectos de recorte de la nueva ley de pensiones. Sin embargo, UGT quiere llevar a los convenios colectivos que las empresas asuman como obligación suya el recorte que supone la aplicación de la ley de reforma de pensiones, recientemente aprobada por el Parlamento.

El problema de las pensiones será uno de los principales temas de enfrentamientos entre los sindicatos y las organizaciones patronales en la discusión de los convenios colectivos de los próximos años. En especial en aquellos sectores, como el financiero, en los que las empresas tienen el compromiso de complementar hasta el ciento por ciento las prestaciones que reciban los nuevos jubilados.El Comité Confederal de UGT, máximo órgano de decisión entre congresos, ha dejado claro que en la negociación colectiva defenderá que se mantengan los complementos de jubilación fijados en los convenios y que se trate de enjugar los posibles efectos negativos de la aplicación de la nueva ley sobre pensiones decidida por el Gobierno y aprobada por el Parlamento.

Las patronales señalan que la austeridad necesaria en el gasto público -y en concreto en la Seguridad Social- es algo imprescindible, que no puede trasladarse a las empresas porque pondría en peligro su rentabilidad económica. De hecho, han intentado en los últimos años suprimir la cláusula de complemento de pensiones de los convenios colectivos, y crecen, al menos en el sistema financiero, las presiones externas para que lo hagan así. Como mucho, según fuentes patronales, admitirían mantener el actual porcentaje de complemento que pagan, pero en ningún caso aumentarlo para enjugar el recorte que supone la nueva ley.

Necesidad de nuevos fondos

Los ocho grandes bancos españoles -Central, Banesto, Hispano, Bilbao, Vizcaya, Santander, Popular y Exterior- pagaron en 1984 un total de 12.752 millones de pesetas como complemento de las pensiones de su personal jubilado para mantener el ciento por ciento de los salarios de activos en el momento de su jubilación. Las cajas de ahorro, por su parte, tienen en la actualidad unos pagos menores, aunque sus desembolsos crecerán más rápidamente como consecuencia de que en sus convenios colectivos mantienen el complemento para todos los trabajadores y además existe una claúsula de revisión en función de la subida de precios.

El Banco de España pidió a finales de 1984 que bancos y cajas de ahorro evaluaran sus necesidades financieras para hacer frente a los compromisos contraídos con los trabajadores. Los ocho grandes bancos contestaron, con un plan actuarial que a finales de 1985 necesitarían tener unos fondos especiales superiores a los 81.000 millones de pesetas para hacer frente al complemento de pensiones de los trabajadores jubilados hasta esa fecha.

En la actualidad los ocho grandes tienen fondos por valor de 27.772 millones de pesetas, .algo más de la cuarta parte de lo que sería necesario. Dos de estos bancos tienen cubierto al ciento por ciento su fondo de pensiones,_y otros dos, hasta el 75% el resto está bastante lejos en sus provisiones, y dos instituciones -Banesto e Hispano- no han destinado ni una sola peseta para constituir fondos con los que hacer frente a una obligación contractual con sus trabajadores. Los pagos efectuados se han hecho con cargo al ejercicio en que tuvieron lugar.

Los cálculos de los grandes bancos incluyen al personal ya en retiro y al que se jubilará a partir de la entrada en vigor de la ley, que serán los que se vean afectados por los efectos de recorte, pero en sus previsiones no se incluye asumir la disminución de las prestaciones. Los argumentos se basan en que su compromiso de complemento de pensiones se ha realizado de acuerdo con unas normas que ahora se ven superadas por una nueva ley. Por tanto, estiman que no deben asumir las consecuencias de una reforma que no cuenta siquiera con su apoyo.

El Banco Exterior es la única entidad que puede no tener problemas al no complementar hasta el ciento por ciento sus pensiones porque puede acogerse a que ninguno de sus jubilados puede cobrar más de 180.000 pesetas mensuales.