Pensiones de los militares republicanos

Acostumbrado a leer en EL PAIS sus editoriales u opiniones justas, me extraña mucho que no hayan escrito nada sobre las pensiones a los militares de la República. No sólo hemos sido discriminados de los vencedores, sino también de otros vencidos. En el mismo diario oficial en que salió mi nombramiento de teniente, se relacionaron otros de maestros, jueces, administrativos, etcétera, de distintos ministerios. Éstos han tenido derecho a reingreso (si la edad se lo permitía) a una jubilación como si hubieran estado en activo, siendo compatible dicha jubilación por otra que les correspondería por su trabajo en empresas particulares. En cambio, nosotros no hemos solicitado el reingreso por considerarlo fuera de lugar; en la jubilación nos dan la mínima de la Seguridad Social (sin tener en cuenta la que nos correspondería por estar en activo) e incompatible con otra que percibamos. ¡Ah!, y que no vengan con las excusas de tenientes en campaña, pues como número dos de mi promoción, entre 800 oficiales, se me comunicó que al terminar la guerra haría un cursillo para comandante, saltando el empleo de capitán. A cinco meses de la promulgación de la Ley nº 37/ 1984, nada se sabe cuándo vamos a percibit nuestras pensiones. Desde luego, cuanto más tarden, menos costoso será para el erario público. Moraleja para futuros ingenuos e incautos: si se presenta otro 18-J y 19-F, quietos en casa; que sean los jerifaltes de izquierda los que vayan a las barricadas y saquen las castañas del fuego.- .