Nueva oferta española para desbloquear las negociaciones con Portugal
España presentó anoche una nueva propuesta global para conseguir un acuerdo que regule las relaciones bilaterales de ambos países en el período transitorio hasta la integración en la CEE.A las dos de la madrugada de hoy los ministros de Asuntos Exteriores de Portugal y España continuaban reunidos en la sede del departamento portugués discutiendo los detalles de esta nueva propuesta con la que se pretendía superar los obstáculos surgidos en la discusión de los temas de pesca y unión aduanera.
Los detalles de la nueva propuesta, que se realizó en el transcurso de una cena mantenida por los miembros de ambas delegaciones, no pudieron conocerse a consecuencia del riguroso pacto de silencio que durante toda la jornada guardaron tanto el ministro español, Fernando Morán, como su colega luso, Jaime Gama.
Al término de esta cena Fernando Morán manifestó que había que lograr al acuerdo "ahora o nunca". Hasta la hora de cerrar esta edición (2.30 de la madrugada), las delegaciones trataban de conseguir un acercamiento político que, de producirse, prolongaría las conversaciones, esta vez a nivel técnico, todo el día de hoy.
"Ahora o nunca"
Si por el contrario no se consiguiera el acuerdo político, no se descarta el recurso al arbitraje de Bruselas. De esta forma se intentaría evitar un retraso en la fecha para la firma del tratado de adhesión de ambos países a la Comunidad Económica Europea, prevista inicialmente para el 1 de enero de 1986.
Una fuente próxima a la delegación española señalaba ayer que la negociación estaba siendo dura, y que los puntos de vista de los dos países -sobre todo en materia de pesca-, seguían muy alejados, aunque no se descartaba una solución si "existe la necesaria voluntad política".
En el transcurso de la negociaciones de ayer, la parte española consideró "inaceptable" la posición portuguesa que pretendía excluir del posible acuerdo sobre pesca cualquier claúsula que repercutiese sobre las aguas territoriales dentro del límite de las 12 millas.
Los negociadores portugueses han acusado reiteradamente a los españoles de ejercer un "verdadero chantaje" al querer ligar el acuerdo aduanero a una solución en el tema pesquero que consagre los derechos que España reivindica.
La conclusión del acuerdo hispano-portugués significaría la liquidacíón de uno de los principales obstáculos aún existentes para la firma del tratado de adhesión de ambos países a la Comunidad.
El ministro español de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, que se trasladó a la capital portuguesa acompañado de una delegación técnica de 18 miembros, mostró este optimismo a su llegada a Lisboa: "No descarto que al fin del día de hoy podamos comunicar que hemos llegado a un acuerdo", dijo Morán.
Optimismo moderado
El ministro español recordó que pese al acercamiento verificado, sobre todo durante el encuentro mantenido el pasado jueves en Estrasburgo con su colega portugués, Jaime Gama, existían aún diferencias por resolver en el capítulo de unión aduanera, en productos industriales y agrícolas y en pesca que constituye desde hace años la parte fundamental del contencioso entre España y Portugal.
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