Argentina acepta medidas de ajuste propuestas por el Fondo Monetario

El Gobierno radical argentino de Raúl Alfonsín anunció el viernes una serie de medidas económicas, entre las que se incluye un aumento del 26% en las tarifas de los servicios públicos y de un 35% en el precio de los combustibles, cumpliendo recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI). Las medidas fueron dadas a conocer en una conferencia de prensa del ministro de Economía, Juan Sorrouille, informa Efe.

Buenos AiresLas nuevas pautas económicas, elaboradas dentro de las pautas ortodoxas habitualmente propuestas por el FMI provocaron disensiones en el Partido Radical, según informaron fuentes de esta formación política. Dichas fuentes señalaron que "la aceptación de medidas recesivas no ha caído nada bien en algunos sectores del partido, es especial en la juventud radical". Durante toda la semana corrieron insistentes rumores de la inminencia de la aplicación de un plan económico de ajuste, que permitiera reducir drásticamente la inflación que se proyecta con un crecimiento anual del 1.200%.En la conferencia de prensa del titular de Economía no se efectuaron anuncios con respecto al nivel de salarios pero, según fuentes que cita la agencia Efe, los salarios de los trabajadores del sector privado aumentarán el 90% de la inflación del mes anterior. En cuanto a los trabajadores estatales, obtendrán un aumento equivalente al 90% del índice de inflación de marzo -el 25%- pero que en ningún momento este aumento podrá ser superado en los próximos meses.

El Fondo Monetario Internacional -institución de la que se encuentra una delegación técnica en Buenos Aires, presidida por el catalán Joaquín Ferrán- ha puesto serios reparos a la política salarial del Gobierno de Alfonsín y a los altos índices de inflación, cuya principal causa atribuyen al gasto público.

Brasil, en la encrucijada

Por otra parte, Brasil, el mayor deudor de los países en vías de desarrollo (más de 100.000 millones de dólares) se encuentra en una difícil encrucijada ante la dificultad de compatibilizar sus objetivos sociales y económicas con las metas propuestas por el FMI. La enfermedad del presidente electo, Tancredo Neves, repercutirá sin duda sobre la toma de decisiones para un nuevo acuerdo con el FMI y la renegociación de la deuda externa, según informan medios financieros locales que cita Efe. De los 104.000 millones de dólares adeudados, 25.300 deben ser amortizados entre este año y 1991, con el pago adicional durante este ejercicio de 13.000 millones en intereses comprometidos con la banca privada.El anterior régimen militar intentó renegociar estos plazos de vencimientos y ampliarlos por 16 años, pero el comité de bancos, presidido por el Citibank, suspendió las conversaciones en,febrero, inmediatamente después de qaue el Fondo Monetario Internacional determinase cortar la entrega de los recursos del acuerdo ampliado.

Esta misma actitud fue asumida por el llamado Club de París (bancos centrales europeos), al que Brasil debe alrededor de 8.000 millones de dólares, y que aguarda, al igual que todos los acreedores, la renegociación con el nuevo Gobierno de Neves.

Por el contrario, México, el segundo gran deudor, firmó el pasado jueves la primera fase de la más importante reestructuración de la historia financiera con más de 600 de sus bancos comerciales acreedores por un total de 48.700 millones de dólares.