Consenso entre los partidos brasileños para gobernar sin Tancredo Neves

Río de JaneiroBrasil tiene desde ayer -y por primera vez en 13 días- un presidente en pleno ejercicio del cargo, el vicepresidente José Sarney, una vez confirmada la imposibilidad de que el presidente electo, Tancredo Neves, se recupere de manera rápida de las graves complicaciones que lo llevaron a sufrir tres intervenciones quirúrgicas de urgencia en 12 días. Los partidos políticos llegaron a la conclusión de que es imposible mantener la situación de interinidad vigente hasta ahora.

En Sáo Paulo, donde se encuentra en una unidad de cuidados intesivos del hospital de Clínicas, la situación de Tancredo Neves era calificada ayer de grave. Sólo en la tarde de hoy pasará el período considerado crítico por los médicos. Las perspectivas de que el presidente electo sobreviva eran consideradas ayer entre un 40% y un 60%.

Para evitar una parálisis total en la máquina administrativa, los dos partidos que conforman la Alianza Democrática, que respaldó la elección de Tancredo Neves y José Sarney (el PMDB y el Frente Liberal) decidieron ayer crear una especie de Gobierno de emergencia. Esa decisión tuvo el respaldo de dos partidos que hicieron oposición al régimen militar, el Partido de los Trabajadores (PT), y el Partido Democrático de los Trabajadores (PDT).

Soluciones urgentes

En una primera etapa, ese Gobierno de emergencia enfrentará una serie de problemas que exigen solución urgente. Hay centenares de puestos intermedios en la máquina administrativa que deberán ser cubiertos sin esperar la palabra final de Tancredo Neves, y una serie de reformas políticas y económicas deberá ser estudiada por el presidente en ejercicio.Por iniciativa del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), el pacto para el mantenimiento de un Gobierno de emergencia permanente, que entraría en funciones en el caso de que Tancredo Neves muera o quede definitivamente imposibilitado para asumir la presidencia, indica la convocatoria de la Asamblea Constituyente antes de noviembre de 1986 (plazo inicialmente previsto) y las elecciones presidenciales directas, antes de 1988.