No hay favoritos indiscutibles para los 'oscars' de Hollywood

Muchos cineastas europeos optan la próxima madrugada a los oscars de la Academia de Hollywood, pero no hay favoritos indiscutibles. Ya están preparadas las alfombras rojas ante el Dorothy Chandler Pavilion y las fiestas que competirán para llevarse, tras la celebración, el mayor número de estrellas. Últimos ensayos ante el espejo y las últimas visitas a los echadores de cartas. Hollywood enloquece. Todos quieren ser parte en el acontecimiento o aparentarlo. Quedan cabos por atar del gran espectáculo que adornará la entrega de los oscars, pero la suerte está echada: los votos han sido recogidos y recontados en absoluto secreto.

HollywoodTampoco cabe averiguar ese resultado antes de la hora señalada. En sus casi 60 años de existencia, en la historia de los oscars no se ha dado un solo caso de indiscrección y, menos aún, de soborno. Como dijera, hace ya años, el cómico Danny Kaye: "Ójalá que el Pentágono supiera guardar un secreto tan bien como nuestra Academia".Lo primero que salta, si empezamos a pensar, es que en esta gran jornada del cine de Hollywood, la participación extranjera, aún sin contar con el malparado premio a la película hablada en "otro idioma", no es tan exigüa como pueda pensar el americano medio. De las cinco películas finalistas, tres de ellas han sido dirigidas y producidas, al menos en parte, por europeos: el británico David Lean (Pasaje a la India), el checo Milos Forman (Amadeus) y el francés, residente en el Reino Unido, Roland Joffe (Los gritos del silencio). De las tres, sólo una tiene un personaje principal norteamericano, transcurriendo también la acción fuera de este país.

Actores británicos

Por otra parte, un gran número de actores mencionados son británicos: Albert Finney, Judy Davis, Peggy Ashcroft, Vanessa Redgrave, sin olvidar al doctor camboyano Haing S. Ngor quien -según todos los pronósticos- va a alzarse con el premio al mejor actor secundario, a pesar de no ser ni siquiera un aficionado.¿Significan estos datos una apertura real de Hollywood a otras cinematografías, a otros ambientes? Sinceramente, creemos que no. La gran factoría del cine sigue tan cerrada e impermeable a cualquier influencia ajena como lo ha estado en los últimos 30 años, o más aún. Los actores británicos siempre son estimados, y con buena razón, aquí. Pero la coincidencia de temas y directores foráneos sólo puede considerarse como algo fortuito. Cualquier que sea el resultado de mañana, Hollywood seguirá despreciando -como diría Machado- cuanto ignora.

Equipo español

La llegada del equipo español de Sesión continua -Garci, Alenda, Marsillach-, algunos periodistas y el director de la Filmoteca Española, Pérez Millán, ha supuesto, como se decía en las crónicas antiguas, "una nota de color". El severo marco de la Acadernia se ha sentido asaltado, como cada año -puesto que ya es costumbre que nuestra película llegue a la ronda final-, por el ruidoso estilo hispano. Nuestra delegación, también como ya es tradición, ha resultado ser la más numerosa. Ningún otro país europeo irrumpe en Hollywood con un despliegue tan aparatoso de cámaras de televisión y micrófonos.Los tiempos han cambiado desde que los directores llegaban aquí por su cuenta y a los productores ni siquiera se les pagaba el subtitulaje de la copia. José Luis Garci y su película, por otra parte, han disfrutado de un apoyo importante por parte de la Dirección General de Cinematograria.

José Luis Garci reconoció la importancia que para Sesión continua tiene esta presencia en Hollywood, "aunque sé muy bien que, en esta ocasión, el Oscar no será para mí", añadió. El productor y distribuidor Alenda, declaró por su cuenta que sólo el dorado trofeo podría, sin embargo, salvar el déficit económico del filme, hasta ahora sin distribución norteamericana.