Nicaragua: la estrategia de la tensión

Le MondeLa presión americana sobre Nicaragua no cesa. Por el contrario, se acentúa, si se juzga por las declaraciones hechas el jueves en Washington por el presidente Reagan en el momento en que, por tercera vez en dos años, vastas maniobras conjuntas organizadas en Honduras por los Gobiernos de Washington y Tegucigalpa obligan al régimen de Managua a una movilización más intensa. Al afirmar que el objetivo de Estados Unidos era quitar el poder a los sandinistas, Reagan ha dado a entender que quiere terminar con la revolución que puso fin, en 1979, a 40 años de dictadura de la familia Somoza.La vigorosa retórica reaganiana está destinada en gran parte a fines internos. La Casa Blanca trata de convencer a un Senado vacilante y dubitativo para desbloquear 14 millones de dólares de ayuda a los contras congelados desde el mes de octubre último. Una decisión sobre reiniciación de esta ayuda debería producirse en marzo, y hay que esperar que desde hoy hasta esa fecha Reagan multiplicará sus esfuerzos de persuasión. ( ... )

En adelante, el combate está situado exclusivamente en el terreno ideológico. Para Reagan, se trata de demostrar a los ojos del mundo que, de Afganistán a Nicaragua, Estados Unidos está firme y concretamente al lado de los combatientes de la libertad. ( ... ) Apoyándose sobre la legitimidad que les proporciona, a sus ojos, las elecciones que han organizado en noviembre último, los dirigentes sandinistas no parecen dispuestos, hoy como ayer, a ceder.

23 de febrero