200 personas paralizan la venta de abonos por teléfono en el teatro de la Zarzuela
Alrededor de 200 personas que acudieron ayer al teatro de la Zarzuela para conseguir abonos de la temporada de ópera se encontraron con las taquillas cerradas. El teatro, mientras la indignación y el revuelo crecían en sus puertas, estaba vendiendo dichos abonos por teléfono. Finalmente, una comisión, elegida espontáneamente de entre los aficionados, consiguió hablar con el director del teatro, paralizar la venta telefónica y llegar al acuerdo de poner a la venta por la tarde en taquilla otros 200 abonos, que se agotaron inmediatamente.
El desconcierto de los aficionados fue provocado, según algunos de los que acudieron ayer al teatro, por el ambiguo texto del anuncio publicado en la Prensa. Este anuncio decía textualmente: "Para la solicitud de abonos, dirigirse al teatro de la Zarzuela". En línea aparte se añadía: "Teléfono 429 82 30, del 28 al 30 de enero, de 10.30 a 14.30 y de 17.30 a 20.30 horas". La idea de los responsables del teatro era la de vender exclusivamente por teléfono los abonos. Así, mientras algunos conseguían su reserva telefónicamente, más de 200 personas se apiñaban ante unas taquillas cerradas y la negativa a dar explicaciones.Al últimas horas de la mañana, el director del teatro, Benito Lauret, consintió en recibir a una comisión de cuatro personas elegidas entre el público quienes posteriormente informaron de los datos obtenidos -a los aficionados reunidos en asamblea en el vestíbulo del teatro. Lauret dijo a la comisión que el teatro ya había vendido por teléfono, a lo largo de la mañana, unos 200 abonos -los gritos de los asamblearios fueron aquí los de "mentira", "imposible", "estaban ya vendidas"- y prometió parar la reserva telefónica para vender por la tarde en taquilla otros 200 abonos, que se agotaron inmediatamente.
El aforo del teatro de la Zarzuela es de 1.140 localidades, y la indignación de los aficionados, en ésta como en otras ocasiones, viene casi siempre provocada por los sistemas de venta y, sobre todo, por el hecho de que "los números no cuadran", como decía ayer otro aficionado. Ayer se vendieron poco más de 400 abonos y, según prometió el director del teatro, con cinco días de antelación se pondrá en taquilla para venta libre el 25% de las entradas (unas 280 localidades), lo que suma un total de unas 700 localidades vendidas. "Es que tendríamos que denunciar al teatro", concluía ayer uno de los asistentes.
Babelia
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