El escritor Joan Fuster ha sido nombrado hijo predilecto de Sueca, su ciudad natal

El escritor Joan Fuster, de 62 años, ha sido nombrado hijo predilecto del Ayuntamiento de Sueca (Valencia), su ciudad natal que nunca abandonó para residir en otro lugar. La corporación municipal tomó el acuerdo en un pleno extraordinario realizado la noche del viernes y le concedió asimismo la medalla de oro de la ciudad. Se trata de uno de los primeros reconocimientos oriciales a la obra y significación cultural del autor de Nosaltres els valencians, expresado desde una institución no académica.

La iniciativa ha contado con el respaldo del presidente de la Generalitat, Joan Lerma, que asistíó al homenaje, de la Consejería de Cultura y de la Diputación de Valencia.Durante una semana, el Ayuntamiento suecano organizó un programa de conciertos de música, conferencias y mesa redonda. El concejal de Cultura, Vicent Vera, manifestó que esta semana de homenaje no necesita justificación. "Fuster y Sueca son ya inseparables en la historia literaria y en la de nuestra población", dijo. "No cabe, por tanto, que dejemos a nuestros nietos la tarea de reivindicarlo. Y no vale la excusa de su condición polémica. Si no fuera polémico, no valdría para nada. La humanidad sólo se pone de acuerdo ante los cadáveres, y no de todos".

Legado oral

El homenaje ha sido la oportunidad para que el cantante Raimon propusiera en una mesa redonda, sobre Fuster, el hombre, la recopilación de su legado oral, ex presado en innumerables con versaciones con amigos. Destacó el afán conversador de Fuster, que a través de la palabra hablada ha transmitido a varias generaciones una forma de pensar sin dogmas. "Hay pocas personas de la cultura que tengan las puertas de su casa abiertas a tantas generaciones, y eso es algo que dura. Esa cultura oral no pasará a la historia. Alguien debía escribir sobre la oralidad de Joan Fuster".El cantante Raimon resaltó también como característica de la personalidad del escritor de Sueca el respeto a la libertad de las personas afines, para que elijan su camino. Esto lo manifestó por la respuesta que tuvo cuando preguntó a Fuster si valía la pena presentarse al Festival del Mediterráneo con la canción ganadora S´en va anar, para reconocer el valor cultural de la lengua catalana. "Haz lo que quieras", respondió Fuster al cantante de Xátiva.

El escultor Andreu Alfaro describió, con profunda admiración, a Fuster, "maestro que no sabe que enseña y pensador preocupado siempre por la colectividad. Nunca ha escrito una línea pensando en él. No deja que piensen que lo que dice es un dogma, aunque lo más eficaz sea la religión". Alfaro reiteró que la lucidez de Fuster se da en la conversación, favorecida por un racionalismo apasionado.

El periodista Vicent Ventura insistió en el talante de gran conversador y en su carácter reflexivo, desconfiado en aceptar primeras explicaciones. En su opinión, Fuster nunca ha incurrido en localismos, pese a vivir toda su vida en Sueca, en la casa paterna, porque mantuvo una estrecha vinculación con influyentes medios de comunicación de Barcelona y Madrid, que han ido incluso a buscarle a su pueblo para contar con él.

Cultua europea

Raimon amplió esta reflexión al destacar la preocupación de Fuster por la cultura europea en las épocas más negras del aislamiento franquista y ha tenido la suerte de escribir literatura de ideas con más horas por delante que el escritor de una ciudad, quien necesita más horas para la vida social.Joan Fuster ha sido, a sus 62 años, distinguido con otros homenajes de carácter estrictamente académico. El autor de El hombre, medida de todas las cosas fue investido doctor honoris causa por la universidad Autónoma de Barcelona el pasado mes de octubre.

Este reconocimiento a su trabajo de investigación se interpretó como una respuesta institucional a los problemas planteados por determinados sectores de la universidad valenciana empeñados en no reconocer a Joan Fuster como catedrático extraordinario.