Kuwait rechaza todo compromiso con los piratas del aire que retienen a los rehenes 'culpables'

El Parlamento de Kuwait respaldó ayer la decisión anunciada el viernes por las autoridades kuwaitíes de no llegar a compromiso alguno con los secuestradores del aerobús de esa nacionalidad que fue desviado a Teherán el pasado martes. Los piratas del aire liberaron ayer a otros 39 pasajeros, pero conservan más de una decena de rehenes -fundamentalmente kuwaitíes y norteamericanos- que consideran culpables, y a los que amenazan con seguir ejecutando sucesivamente. El aparato secuestrado tiene 13 ventanas rotas, y parece imposible que despegue.

La liberación de los 39 pasajeros se produjo después de que Radio Teherán aceptara difundir el viernes un mensaje de los piratas del aire. Estos comunicaron a la agencia iraní Irna que liberarían a los rehenes "inocentes", pero nunca a los "culpables", al tiempo que anunciaban la próxima ejecución de dos funcionarios norteamericanos y tres kuwaitíes. Los secuestradores han asesinado ya a cuatro rehenes.La mayoría de los pasajeros liberados parecen ser pakistaníes. No se conocía anoche con certeza la situación de la tripulación europea, aunque un médico afirmó que se encontraba en "buen estado", ni tampoco el número exacto de rehenes que continúan a bordo. Algunas fuentes lo fijan en 10 y otras en 18.

Un primer grupo de 16 pasajeros descendió del avión a las 3.45, hora peninsular española, y los otros 23 liberados lo hicieron una hora más tarde. Ellos confirmaron que el tiroteo registrado en la noche del viernes se produjo cuando algunos rehenes trataron de reducir a los secuestradores, que son "cuatro o cinco" y hablan con acento libanés. Uno de los pasajeros resultó gravemente herido en ese enfrentamiento, y puede morir en las próximas horas, según informó un médico que fue recibido en el aparato. Los secuestradores no permitieron que fuera evacuado.

Trece ventanas del avión quedaron también destrozadas por el mismo tiroteo, y se considera prácticamente imposible que el aerobús pueda despegar en tales condiciones.

Uno de los rehenes, que parece ser el funcionario de la USAID norteamericana Charles Kipper, pidió ayer al control del aeropuerto que "se satisfagan las peticiones de los secuestradores, porque si no habrá más ejecuciones". Los piratas sacaron a Kipper a la escalera del avión, para golpearle en público.

Las autoridades kuwaitíes, al anunciar que no pondrán en libertad a ninguno de los 17 radicales islámicos encarcelados en Kuwait cuya liberación exigen los piratas del aire, hicieron un llamamiento a las autoridades de Irán para que "intervengan seriamente, con objeto de preservar la seguridad de la tripulación y los pasajeros". Teherán ha considerado, por su parte, que "desgraciadamente, el Gobierno kuwaití no ha hecho todo lo que estaba en su mano para solucionar este asunto".

Las autoridades iraníes rechazaron asimismo las acusaciones formuladas el viernes por el presidente de EE UU, Ronald Reagan, en el sentido de que el régimen del imam Jomeini "no hace todo lo que pudiera y debiera hacer" para poner fin al secuestro.