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ECOLOGÍA

El acuerdo del Mercado Común sobre la gasolina sin plomo afecta poco a España

Andrés Ortega

El acuerdo político alcanzado el jueves entre los 10 países de las Comunidades Europeas para introducir la obligatoriedad de la disponibilidad a la venta de gasolina sin plomo a partir del 1 de enero de 1989 afecta poco a España, indicaron ayer expertos españoles. Sin embargo, si para esa fecha España es miembro de la Comunidad en el territorio español también se tendrá que vender esta gasolina -la gasolina verde, como la llaman los alemanes-. Los diez no se han puesto de acuerdo para reducir el contenido en plomo de la gasolina normal y súper, decisión que hubiera tenido amplias repercusiones para el caso español.

El contenido en plomo de la gasolina en España es capítulo cerrado de las negociaciones de adhesión. España se ha comprometido a equiparar desde la fe cha de su ingreso su gasolina normal a la comunitaria, con un contenido máximo de 0,40 gramos de plomo por litro. Para la reducción de 0,65 gramos litro a la norma comunitaria de la gasolina super, España dispondrá de un año más.La única novedad que aporta el acuerdo de ayer es que España tendrá también que aceptar -o negociar una derogación- para la disponibilidad de la gasolina sin plomo a partir de 1989 en oetanajes de 85 y 95. En cualquier caso, los diez no han decidido aún el reparto -o la densidad- en el territorio del número de bombas de gasolina sin plomo. 1989 es una fecha tope, permitiéndose, naturalmente, la introducción de la gasolina verde antes sobre una base voluntaria, como lo hace ya de hecho la RFA.

En cuanto a la reducción del contenido en plomo, de 0,40 a 0,15 gramos litro, para el resto de la gasolina, que seguirá vigente durante muchos años aún, la CEE e ha limitado a alentar a los 10 países miembros en este camino. Francia, especialmente, se resistía a aceptarlo, dado el coste que supone.

Importaciones de calidad

Una decision así hubiera obligado a España a renegociar toda la cuestion con los diez y a reestructurar sus refinerías, pagando una mayor cifra de importaciones de petróleo al tener que comprar una materia prima de mejor calidad. En cuanto a la obligatoriedad de un octanaje igual en toda la CEE para las diversas gasolinas, salvo ahora en las sin plomo, no existe norma común.

Las emisiones de plomo en la atmósfera son causas probadas de enfermedades nerviosas y cardiovasculares en las mujeres embarazadas y en los niños. Para el medio ambiente en general, lo importante no es tanto el plomo en la gasolina verde como la limitacion de las emisiones de los tubos de escape de óxidos de nitrógeno y de carbono y de hidrocarbonos no quemados, responsables en gran parte de las lluvias ácidas que han destruido, de modo dificil de remediar, el 45% de los bosques en la RFA.

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