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LA LIDIA

Los seis toros de una corrida de México se lidiaron drogados

Seis toros del hierro Mariano Ramírez se lidiaron bajo los efectos de una droga en la plaza de Tlaxcala (México). El festejo se celebró el pasado droga, y el comportamiento en el ruedo de las reses, que acusaron una fuerte debilidad de patas, provocó en el público un gran escándalo. Los propietarios de la ganadería, Carlos y Gerardo Salas Luján, denunciaron el caso en plena corrida. El gobernador del Estado ordenó la apertura de una investigación.

Carlos Salas informó a este periódico de las vicisitudes de la corrida desde que salió de la finca, en Aguascalientes. Con ligeras variaciones en los distintos toros, el comportamiento de todos ellos, según el ganadero, tuvo estas características comunes: se arrancaban a los primeros capotazos y, de súbito, les fallaban las patas. En general embestían con nobleza y bravura, pero en la pelea con los caballos daban sensación de extrema debilidad. Las caídas eran continuas."Ya desde la salida del toril",explica el ganadero, "se les notaba chorrilletos, es decir, diarreicos. Salvo en las carreras iniciales, ninguno dio señales de la casta que es propia de nuestra ganadería; de esa característica viveza en la mirada, que les hace estar pendientes de todo. Por el contrario, tomaban la muleta boyantes, pero sin codicia agresiva y, por supuesto, se caían. Salían, de la suerte distraídos o se paraban mirando al tendido, y no fijaban bien la vista".

Salas puede demostrar que a los toros lidiados en Tlaxcala se les inyectó droga, si bien esto ocurrió más de 24 horas antes de que saltaran a la arena. Según su testimonio, la corrida salió de la finca el pasado viernes día 9, en camión y acompañada por el ca poral, José Hermosilla.

'Arreglo' en Apizaco

A primera hora de la mañana del sábado, el vehículo fue detenido en el pueblo de Apizaco por los empresarios de la plaza de Tlaxcala, Gabriel de la Torre y Mariano González, y por El Tableado, encargado de arreglar las reses que torea Eloy Cavazos, el cual fue cabecera de cartel en este festejo de Tlaxcala. Los empresarios dijeron que El Tableado iba a tocar los toros y redujeron al caporal, que pretendía impedirlo.A cada una de las reses le inyectaron medio centímetro cúbico de una droga que el caporal identificó como Ronpoori, si bien el ganadero no está seguro de que fuese este fármaco. Minutos más tarde hizo efecto, y los. toros se fueron sentando en los cajones. Entonces los enmaromaron la comarnenta y los levantaron por la parte delantera, hasta quedar casi colgados, para despuntarles las astas. La manipulación duró aproximadamente hora y media, y, una vez concluida, el camión, con los toros, continuó viaje.

El caporal dio cuenta de lo ocurrido, por teléfono, a los ganaderos, y éstos acudieron inmediatamente a Tlaxcala, a tiempo para presenciar el desembarque y apartado de los toros. Pudieron observar que tenían el maslo pelado en una extensión de aproximadamente 25 centímetros, como consecuencia de la fricción contra el suelo de los cajones cuando los colgaron para afeitarlos.

Ante el anormal comportamiento de las reses y las protestas del público, en plena corrida los ganaderos denunciaron la manipulación, y el gobernador ordenó que se recogieran muestras de orina, estiércol, hígado y sangre, para su análisis en laboratorio. Sin embargo dice Carlos Salas: "Temo que se malogre la investigación pues aquí hay muchos intereses creados, empezando por Cavazos, figura del toreo actual en México, a quien no interesa una investigación de este tipo, que podría denunciar su responsabilidad en las manipulaciones de las reses".

La ganadería "Mariano Ramírez" es Saltillo puro y sus toros son cárdenos, entrepelaos o chorreaos, con pitones vueltos.

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