Las acciones de violencia estudiantil se extienden a tres distritos universitarios

Las manifestaciones de protesta de los estudiantes, iniciadas hace tres semanas en el País Vasco, se extienden por diversas universidades y adquieren cada día mayores tintes de violencia. La subida de las tasas académicas, así como las de los precios de los alquileres y de los transportes, junto a la aplicación ilegal del númerus clausus en las carreras con mayor demanda, constituyen los principales motivos de estas protestas.

Un grupo de estudiantes en Santiago de Compostela quemó parcialmente ayer la puerta principal del rectorado de la Universidad, un edificio de gran interés histórico y artístico que forma parte del complejo monumental de la plaza del Obradoiro.Los estudiantes gallegos se manifestaban contra la subida de las tasas, que este curso se incrementaron en un 14%, y contra los elevados precios de los alquileres de las pensiones y viviendas en que se hospedan durante el curso quienes no residen en la capital gallega.

Por otra parte, los estudiantes de todas las facultades vizcaínas de la universidad del País Vasco, excepto la de Medicina, secundaron ayer la huelga de duración indefinida convocada en señal de protesta contra los expedientes académicos abiertos a 14 alumnos, informa Efe.

Los expedientes académicos fueron interpuestos por el rector Gregorio Monreal ante la ocupación ilegal de la sede del rectorado y aula magna de Lejona por estudiantes afectados por los problemas del transporte y por la aplicación del númerus clausus.

También ayer unos 700 alumnos de la facultad de Derecho de la Universidad de Cádiz, situada en Jerez de la Frontera, tomaron parte en una manifestación contra la imposición del calendario de exámenes. En La Coruña unos 1.000 estudiantes de enseñanza media protestaron contra la supresión del transporte escolar para los alumnos de formación profesional.

Estudiantes del País Vasco provocaron importantes destrozos en la delegación del Gobierno autónomo en Bilbao el pasado 19 de octubre para exigir la gratuidad de los transportes que necesariamente han de utilizar para desplazarse a los centros universitarios situados fuera de la capital bilbaína.

En Madrid, una semana más tarde, el 26 de octubre, un grupo de manifestantes, que protestaban contra la subida de las tasas y la aplicación del númerus clausus en determinadas escuelas y facultades, retuvo durante más de media hora en la entrada de la Escuela de Estomatología al rector de la Complutense, Amador Schüller, quien necesité la ayuda de la policía para poder abandonar el lugar.