El sacerdote español al que se negó la entrada en Chile trabaja por los derechos humanos

El sacerdote español Ignacio Gutiérrez de la Fuente, de 42 años de edad, al que las autoridades chilenas negaron el pasado miércoles la entrada en el país, dirige desde el año pasado la más importante organización de derechos humanos del país andino, la Vicaría de la Solidaridad.

Gutiérrez de la Fuente -que llevaba más de 12 años en Chile y ha visto repetidamente denegada en los dos últimos años su solicitud de nacionalidad- fue acusado por el Gobierno de hacer manifestaciones públicas en contra del régimen y de haber asistido a una reunión con exiliados chilenos en Roma, en la que estuvieron presentes dirigentes comunistas.

Creada en 1976 por el entonces arzobispo Raúl Silva Enríquez, la Vicaría se ha convertido en la única institución de la Iglesia que defiende a los detenidos políticos. Durante sus ocho años de vida, ha presentado recursos de amparo por 8.500 personas y ha defendido a miles ante los tribunales.

La Vicaría, que depende del arzobispado de Santiago, mantiene numerosos programas de ayuda a los pobres y a perseguidos del régimen militar, que van desde la organización de ollas comunes en las poblaciones pobres de Santiago, hasta la atención a heridos en las jornadas de protesta. Esta institución recibe apoyo financiero del Consejo Mundial de Iglesias y de organismos eclesiásticos de otros 13 países, España entre ellos.