Guerra entregó al presidente de Argelia un mensaje de Felipe González

El vicepresidente del Gobierno español, Alfonso Guerra, se entrevistó ayer por la tarde con el presidente de Argelia, Chadli Benyedid, y le entregó un mensaje personal del presidente del Gobierno, Felipe González, cuyo contenido no se dio a conocer. Tampoco se hicieron públicos los temas tratados durante la entrevista, si bien se supone que ésta de desarrolló, en buena parte, sobre el contencioso que ambos países mantienen, en la actualidad, en torno al contrato de suministro de gas natural argelino.Guerra, que se encuentra en Argel invitado para presenciar los actos conmemorativos del trigésimo aniversario de la revolución argelina, tenía previsto mantener hoy nuevos contactos con otras autoridades, pero la ausencia de Madrid de Felipe González -que asistirá en Nueva Delhi al entierro de la jefa del Gobierno indio, Indira Gandhi- le ha obligado a adelantar su regreso para hacerse cargo interinamente del Gabinete.

A su llegada al aeropuerto deArgel, Alfonso Guerra declaró a la agencia Efe que España "no solamente desea mantener, sino reforzar, sus relaciones con Argelia", que "existe esa voluntad política" y que tal perspectiva tiene en cuenta "el equilibrio de nuestras relaciones en el Magreb".

Guerra asistió ayer por la mañana, desde la tribuna de invitados, al desfile militar y civil con el que se conmemoraba la revolución. El vicepresidente del Gobierno español ocupaba un lugar destacado, junto a diversos miembros del Gobierno argelino y dirigentes del Frente de Liberación Nacional, el partido único de ese país.

En la primera fila de la tribuna estaban los presidentes de Argelia y Túnez, Chadli Benyedid y Habib Burguiba, respectivamente, acompañados de sus esposas; el dirigente palestino Yasir Arafat; el ministro francés de Asuntos Exteriores, Claude Cheysson; el presidente de la Asamblea Nacional argelina, Raba Bitat y el presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz.

Por la noche, Guerra, acompañado del director general de África y Oriente Próximo del Ministerio de Asuntos Exteriores, Manuel Sassot, acudió, como el resto de las autoridades invitadas, a la recepción ofrecida por el Gobierno argelino en el nuevo gran anfiteatro construido frente al Santuario de los Mártires, en una de las colinas que rodean la bahía de Argel.

Contenciosos económicos

En su entrevista con Benyedid se cree que Alfonso Guerra habrá reiterado el deseo de España de resolver los contenciosos económicos y comerciales con Argelia y la preocupación con que se siguen en Madrid las perspectivas de una interrupción de las relaciones comerciales debido al actual bloqueo de las negociaciones sobre el gas.Esta es la segunda vez desde su llegada al Gobierno que Alfonso Guerra visita Argelia. La primera vez fue en marzo de 1983, siendo acompañado en aquella ocasión por los ministros de Industria y Energía, Carlos Solchaga, y de Obras Públicas, Julián Campo, así como por dos secretarios de Estado, dos subsecretarios y 14 directores generales. Aquel viaje se produjo unos días antes de que el presidente del Gobierno español, Felipe González, se desplazara a Marruecos en visita oficial. De aquel viaje salió el compromiso de renegociar la compra de gas argelino, contencioso que sigue pendiente y que ha perjudicado gravemente los intercambios comerciales entre ambos países.

En marzo de 1983, Guerra se entrevistó, además de con las más altas autoridades argelinas, con el responsable del comité de relaciones exteriores del Frente Polisario, Salem Uld Salek, al que comunicó que España no estaba dispuesta a denunciar los acuerdos de Madrid sobre el Sáhara, por los que se cedió a Marruecos la soberanía de este territorio que fue colonia española hasta 1976. El PSOE había mantenido muy buenas relaciones con el Polisario durante los años en que se encontraba en la oposición.