Múltiples peticiones parlamentarias para que Siles Zuazo deje la presidencia boliviana

Las insistentes peticiones a Hernán Siles Zuazo para que abandone la presidencia de la República de Bolivia por parte de la oposición política, la ausencia de soluciones a la aguda crisis económica y la puesta en cuestión por parte de empresarios y sindicatos de las medidas gubernamentales han logrado colocar en la cuerda floja a la precaria democracia boliviana, que el 10 de octubre cumplirá dos años de vigencia en este país de seis millones de habitantes.La petición de renuncia que, invocando el civismo de Siles, presentó Acción Democrática Nacionalista (ADN, encabezada por el general Hugo Banzer) fue apoyada en las últimas horas por varios miembros del otro gran partido de la oposición, el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), que dirige el ex presidente Víctor Paz Estenssoro.

El Gobierno de Siles, que en principio restó importancia a las peticiones de la oposición, considera ahora que son "inconstitucionales" a todas luces y que el poder ejecutivo "no estaría obligado a acatarlas de ninguna manera", según expresiones del ministro del Interior, Federico Álvarez Plata.

La derechista ADN y el MNR, de centro derecha, justifican su solicitud en lo que denominan total fracaso gubernamental en la administración de la crisis y por las supuestas vinculaciones del Gobierno con el narcotráfico, señaladas en un informe del cesado presidente de la Comisión de Lucha contra el Tráfico de Drogas, Rafael Otazo, pero que hasta el momento no han podido ser comprobadas en las investigaciones abiertas por el Parlamento.

Pero frente a este creciente movimiento parlamentario que busca un cambio en el poder ejecutivo -apelando posiblemente a la sucesión constitucional temporal hasta la realización de nuevas elecciones- se alza la firme posición de los trabajadores bolivianos, que, pese a que no están de acuerdo con la política económica, respaldan el proceso democrático y al Gobierno constitucional.

El apoyo de Lechín

El viejo líder sindical Juan Lechín dijo en la noche del jueves, en un programa de televisión, que "la alternativa a Hernán Siles es Hernán Siles", reflejando cabalmente así la actual situación política boliviana y la falta de opciones de cambio.Disidentes del Movimiento de la Izquierda Revolucionaria (MIR) acusaron a uno de sus líderes, el vicepresidente Jaime Paz Zamora, de "alentar la conspiración derechista" para hacerse con la presidencia. La denuncia fue vehementemente rechazada por dirigentes del MIR, que afirmaron que "no nos confundirán y menos extraviarán los cantos de sirena con que se quieren cautivar nuestros oídos".

En este difícil marco de oposición, el equipo económico del Gobierno tiene el propósito de dictar nuevas medidas, pero su sola mención ha despertado ya protestas entre la ciudadanía y los trabajadores, afectados por una inflación del 1.000%, la escasez de productos esenciales y un dramático descenso en el poder adquisitivo de los salarios. Ayer comenzaron marchas sindicales en todo el país.