Carter se enzarza en una polémica sobre la CIA

El ex presidente norteamericano James Carter entró ayer en la dura polémica abierta por la actual Administración republicana al vincular el reciente atentado contra la Embajada norteamericana con la "casi total destrucción de la capacidad" de los servicios de inteligencia de Estados Unidos durante el mandato demócrata. Carter declaró que se trata de un "vulgar insulto personal".

Carter, que tuvo como vicepresidente a Walter Mondale -actual aspirante demócrata a la Casa Blanca-, manifestó que todas las tragedias sufridas en Oriente Próximo eran debidas a la "sumamente imperfecta política del presidente Ronald Reagan y a las inadecuadas medidas de seguridad tomadas para evitar cualquier desastre".

El ex presidente añadió que Reagan, en sus tres años y medio de mandato, se ha limitado a acusar falsamente a sus predecesores de los errores que está cometiendo.

La Casa Blanca ha tratado de apaciguar la polémica acusando a la Prensa de haber distorsionado las palabras pronunciadas por Reagan contra la Administración del presidente demócrata James Carter.

El portavoz presidencial, Larry Speakes, afirmó que Reagan se había limitado a criticar el que los demócratas redujeron el énfasis sobre el elemento humano en beneficio de los aspectos técnicos, aunque reiteró que este cambio de orientación había debilitado la capacidad de los servicios de inteligencia norteamericanos.

El ex director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) Stansfield Turner acusó a Reagan de hacer más daño a la CIA que cualquier otro presidente de la historia de Estados Unidos".

Dirigentes del Partido Demócrata calificaron al presidente Reagan de "irresponsable" por sus afirmaciones lanzadas el pasado miércoles.

El presidente del comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes del Congreso, el demócrata Edward Boland, dijo, por su parte, que durante la Administración Carter se dio prioridad a las actividades de inteligencia contra el terrorismo.