2.500 millones de personas seguirán la ceremonia de apertura
La ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles tendrá lugar el sábado, madrugada del domingo en España, y en ella participarán más de 10.000 personas. Será presenciada en el Coliseo de Los Ángeles por 88.000 espectadores y se calcula que 2.500 millones de personas en todo el mundo la seguirán por televisión.Un portavoz de la organización aseguró ayer que habrá pocas sorpresas con respecto a las ceremonias de otros Juegos, pero que, de todos modos, será un acto ciertamente espectacular.
Durará aproximadamente tres horas e incluirá el desfile y parada de atletas de los 141 países participantes. El presidente de los Estados Unidos pronunciará el discurso de 16 palabras, con el que declarará abiertos los Juegos. La forma en que se desarrollará el acto más importante del programa se mantiene en secreto.
El productor cinematográfico David Wolper es el supervisor general de los trabajos de la ceremonia inaugural. Es también el creador de la música original de la ceremonia de apertura, para lo que reunió a varios de los más afamados compositores estadounidenses de la actualidad.
Wolper ha producido más de cien películas y shows televisivos, entre los que se incluye la serie Raíces y un documental sobre los Juegos Olímpicos de Múnich. "La ceremonia será muy emocionante, y en ella predominará la inspiración de las personas que actúen", afirmó ayer.
La primera intervención correrá a cargo de miles de miembros de coros de iglesia, bandas escolares y bailarines, dirigidos por los mejores coreógrafos de Estados Unidos, que formarán con sus cuerpos los cinco anillos que integran el emblema olímpico sobre el pavimento del Coliseo.
A continuación, serán interpretadas composiciones de varios de los mejores músicos norteamericanos en la historia, como Gerscliwin, Irving Berlin y Cole Porter.
Murió la mascota
Un inconveniente que deberá ser subsanado antes del sábado es la sustitución de Bombardero, el águila cuya caricatura, Sam, es la mascota oficial de los Estados Unidos y de los Juegos Olímpicos, que murió el pasado día 15 en su propia jaula por causas desconocidas según se supo ayer. Bombardero debía sobrevolar el Coliseo angelino en la ceremonia de apertura.
El ave fallecida pertenecía a la rara especie de águila calva, de la, que en la actualidad sólo quedan unos 5.000 ejemplares en todo el mundo. En California, su supervivencia está protegida por el Laboratorio Federal de la Vida Salvaje. Los organizadores de los Juegos recibieron un permiso especial para entrenar a Bombardero.
David Wolper indicó que la organización de la ceremonia está ya buscando un sustituto del águila muerta, y que podría ser un águila dorada de 13 años de edad. De no lograrse el entrenamiento de ésta, número no sería realizado.
