Transfusiones de sangre
En respuesta a doña Eva Laguna, de Barcelona, que refiere en EL PAIS (27 de marzo de 1984) el fallecimiento de su padre, que atribuye a una transfusión sanguínea practicada hace 32 años, en la cual le transmitieron hepatitis, me es grato informarle lo siguiente:
1. Antes de extraer sangre a nadie, se trata de averiguar que la extracción no perjudicará al donante ni al receptor.
2. La sangre extraída se analiza detenidamente, y de una forma muy especial en lo que se refiere a la transmisión de hepatitis, entre otras enfermedades.
3. La supervivencia de 32 años de una persona con hepatitis parece inclinar a un pronóstico benigno de la misma o a un diagnóstico diferente.
4. Pongo en duda por completo lo que dice la firmante de que muchas personas donan sangre para poder comer un bocadillo después.-
Director nacional del programa de sangre de la Cruz Roja.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.