La 'cumbre' del Comecon finaliza con un documento que justifica la necesidad de mayor cohesión en el Este

Con un documento político y otro económico, donde se propugna y se justifica la necesidad de una mayor cohesión del Este, concluyó ayer en Moscú la cumbre extraordinaria del Comecon (Mercado Común socialista), en la que, durante tres días, han participado dirigentes de los 10 países miembros de la organización. El anuncio más significativo ha sido el de que el sistema de precios del petróleo va a reflejarse más en el suministro de crudo de la Unión Soviética a sus aliados, flexibilización que, en opinión de los observadores y habida cuenta de la tendencia a la baja de los últimos cinco años, podría traducirse en mejores condiciones que las actuales para los compradores.

Este tipo de reuniones, la última de las cuales se celebró en 1969, se repetirá cada cinco años con objeto de coordinar los planes quinquenales, según manifestó ayer en una conferencia de prensa el jefe de¡ departamento de in formación del Comité Central del PCUS, Leonid Zamiatin.La Unión Soviética seguirá su ministrando petróleo, gas y energía eléctrica a los países europeos aliados, dijo Zamiatin, quien, respondiendo a una pregunta de EL PAIS, señaló que el sistema de precios en el mercado mundial va a reflejarse más en la estructura del precio del crudo en el marco del Comecon. Hasta ahora, los precios del crudo soviético vendido al Comecon se fijan de acuerdo con el promedio de los del mercado libre durante los últimos cinco años.

Aunque la Unión Soviética sigue vendiendo petróleo a sus aliados a un precio inferior al mercado libre, las facturas se han incrementado en los últimos años, al tiempo que disminuían los suministros (10% de descenso en 1982 y estabilización en 1983), dado que a la URSS le resultaba más rentable vender su petróleo en el mercado libre en divisas.

El tema de los precios del petróleo era una de las cuestiones de fondo de la cumbre extraordinaria, a la que han asistido jefes de partidos comunistas y de Gobierno de los países miembros del Comecon, con excepción de Cuba, representada a nivel de vicejefe de Gobierno. Zamiatin señaló ayer que el mecanismo de precios va a mejorarse y hacerse más flexible.

Directrices básicas

Dada la evolución de los precios del petróleo en el mercado libre, con una tendencia a la baja durante los últimos cinco años, una fórmula más flexible, que tenga en cuenta los precios actuales y no los precios más altos del pasado, favorecería a los países del Este fuertemente dependientes del crudo soviético, en opinión de expertos económicos en la capital soviética.

Los documentos finales de la cumbre, cuyo texto será divulgado hoy, consisten, respectivamente, en una declaración sobre "las directrices básicas para el desarrollo y profundización de la cooperación económica, científica y técnica de los países del Comecon", y otra sobre el "mantenimiento de la paz y la cooperación económica internacional".

Según un resumen verbal de las declaraciones, efectuado ayer ante la Prensa por portavoces soviéticos, el documento político señala que la comunidad socialista tiene toda la fuerza necesaria para oponerse a la actitud de Washington, que busca la superioridad militar, amenaza a la paz y utiliza métodos económicos como instrumento de presión política.

El documento económico, a su vez, contempla el supuesto de que un sistema planificado socialista es superior al de economía libre de mercado y trata de ligar esa idea con una serie de medidas de cooperación y división del trabajo en el seno del Comecon.

El documento económico aprobado en la cumbre esboza, siempre según el resumen oral facilitado, líneas de cooperación entre los países miembros en el campo de la energía, abastecimiento de mercancías y servicios, electrónica, construcción de robots y maquinaria. Asimismo incide en el ahorro de medios, la especialización del trabajo (en industria electrónica y química), el incremento del comercio. Los dirigentes del Comecon fijaron también la coordinación de los planes quinquenales para el período 1986-1990 y un programa científico-técnico para los próximos 15 años. Asimismo, la cumbre acordó programas especiales de ayuda para Vietnam, Cuba y Mongolia, los países menos desarrollados del grupo.

En un discurso de clausura, el líder soviético, Konstantín Chernenko, calificó de "éxito" la cumbre y señaló que durante los 35 años de existencia de la organización ha habido "deficiencias y dificultades debidas tanto a factores objetivos como subjetivos".

Según Chernenko, la cumbre discurrió con un "intercambio de opiniones franco, detallado y fructífero sobre los problemas claves de la vida de la comunidad socialista y la situación internacional".

El líder soviético dijo que "se ha dado un importante paso adelante en la armonización de la política económica".

Chernenko subrayó que la URSS no ha "elegido la peligrosa prueba de fuerza" impuesta por "los círculos más reaccionarios" de EE UU. El dirigente ofreció a los países occidentales "condiciones honestas" de coexistencia pacífica.