Giscard propone que se firme un nuevo tratado de la CEE dentro de tres años

El ex presidente de la República Francesa Valéry Giscard d'Estaing ha propuesto que los actuales 10 países miembros de la CEE más España y Portugal firmen en 1987, en Bruselas, un nuevo tratado europeo. La fecha propuesta coincide con el 302 aniversario del Tratado de Roma, con el que se fundó la CEE.Giscard pide además que se creen unos cascos azules europeos. En el ambiente preelectoral de estas semanas que anteceden a las elecciones de diputados para el Parlamento Europeo, convocadas para el próximo 17 de junio, se barajan otras ideas. Entre ellas, un documento de Helmut Kohl sobre la unión política.

Giscard ha hecho su propuesta en un artículo publicado por el diario belga Le Soir como adelanto de una conferencia que dará mañana en el Palais des Beaux-Arts de Bruselas. El nuevo tratado comunitario, afirma Giscard, debería ser ratificado por referéndum popular en los 12 países firmantes. El texto fijaría unas "etapas y calendarios precisos" para avanzar en la construcción europea. También ampliaría las prerrogativas legislativas del Parlamento Europeo.

Por otra parte, Valéry Giscard d'Estaing reitera su idea de que el presidente del Consejo Europeo (mal llamado cumbre de la CEE) debería ser elegido por sufragio universal. La presidencia del Consejo no cambiaría así cada seis meses. Giscard quizá esté pensando en él mismo para el cargo.

Probablemente la más novedosa de las propuestas de Giscard es que los jóvenes puedan prestar su servicio militar en regimientos de cascos azules europeos puestos a disposición de las Naciones Unidas. Giscard pide además que los doce coordinen sus políticas de defensa a través de reuniones periódicas de los ministros del ramo y de los jefes de los estados mayores.

Por su parte, el canciller de la República Federal de Alemania, Helmut Kohl, ha presentado al actual presidente francés, François Mitterrand, un documento que contiene sus ideas sobre la unión política europea. No se trata de proponer un nuevo tratado, pero sí de aproximar progresivamente los poderes del Parlamento Europeo a los de los Parlamentos nacionales. Pese al contexto electoralista, las preocupaciones alemanas parecen serias.