Duros enfrentamientos entre trabajadores de Sagunto sobre el principio de acuerdo con el INI para cerrar la cabecera

Los trabajadores de Altos Hornos del Mediterráneo (AHM) decidirán hoy, mediante un referéndum que se celebrará en la fábrica, si aceptan o no el principio de acuerdo alcanzado en Madrid entre los representantes del comité de empresa y las centrales CC OO y UGT, de una parte, y los del Instituto Nacional de Industria (INI), de otra. Durante la asamblea que se celebró ayer en la factoría, en la que los miembros del comité de empresa informaron sobre las negociaciones y el principio de acuerdo, se produjeron enfrentamientos violentos, intentos de agresión y empujones entre los partidarios de aceptar el acuerdo y los que estaban en contra.

El principio de acuerdo incluye la aceptación del calendario previsto para el cierre de la cabecera, que finaliza a principios de octubre con la paralización del horno alto número 3, a cambio de generalizar la suspensión de contratos sin que se produzcan despidos y garantizar puestos alternativos de trabajo.El responsable de siderurgia de la Federación del Metal de CC OO de la Comunidad Valenciana, Javier Martínez, estuvo a punto de ser agredido, cuando hablaba a la asamblea, por los partidarios de negarse al acuerdo. Hubo enfrentamientos físicos entre los miembros del comité de empresa partidarios del voto afirmativo y los del sector más radical de CC OO, que, entre otras cosas, propugnaban la celebración de una asamblea popular, en lugar del referéndum.

Mientras el presidente del comité, Miguel Campoy, se definió a favor de votar sí, al igual que Javier Martínez, el secretario general de CC OO del Camp de Morvedre, Ángel Olmos, que se alinea políticamente con el partido de Ignacio Gallego, defendió el no y era partidario de la asamblea en el campo de fútbol.

Pese a todo, el sector oficial de CC OO, al que pertenece la mayor parte del comité de empresa, dejó claro que no estaba de acuerdo con el cierre de la cabecera y que la responsabilidad de esta decisión habrá de ser exclusiva del Gobierno. Javier Martínez indicó que si de aquí a octubre no se cumplen las previsiones de creación de empleo contenidas en los acuerdos habrá nuevamente una fuerte oposición a que se cierre el horno alto número 3.

Martínez añadió que el principio de acuerdo era muy importante porque va más allá del conseguido respecto de Aceriales y porque ha conseguido romper la dinámica que intentaba imponer el Gobierno en materia de reconversión.

Los trabajadores de AHM votarán, desde las once de la mañana hasta las once de la noche de hoy, en ocho mesas establecidas en la factoría. El resultado no se conocerá probablemente antes de medianoche. En la consulta efectuada ayer en las oficinas centrales de Madrid de AHM, con una plantilla de 125 trabajadores, se registró una participación de 93 empleados, de los que 83 votaron a favor del acuerdo, 7 lo hicieron en contra y se contabilizaron 3 votos en blanco.

CC OO no acepta el cierre

Por otra parte, Juan Ignacio Marín, secretario general de la Federación del Metal de CC OO, señaló ayer que el acuerdo de AHM supera positivamente al de Aceriales y entra de lleno en la filosofía que sobre los excedentes generados por la reconversión ha defendido este sindicato. Marín insistió en que CC OO seguía sin aceptar el cierre de la cabecera de la siderurgia de Sagunto, que era una decisión política y cuya responsabilidad "debe recaer sobre quien la ha tomado", y afirmó que el acuerdo firmado en la madrugada del miércoles había sido posible gracias a la presión de los trabajadores.La Federación del Metal de CC OO aportó un documento comparativo entre el acuerdo de Aceriales -firmado entre UGT, ELA-STV y la dirección de las empresas del grupo, y presentado en su día como modélico- y el de AHM. A juicio de esta organización, mientras que en el primero se establecen de forma obligatoria las jubilaciones anticipadas, en el caso de Sagunto éstas son voluntarias y no requieren la suspensión de contratos. Por otra parte, en cuanto a compromisos de empleo, quedan más explicitados en AHM que en Aceriales, al tiempo que se recogen una serie de condiciones de recolocación no contempladas en el acuerdo de las empresas vascas.

Según resaltó Marín, la solución dada al caso de Sagunto es una demostración clara de que por parte de CC OO existe voluntad negociadora, siempre y cuando los acuerdos recojan garantías suficientes para los trabajadores.

El secretario general del metal de CC OO declinó pronunciarse sobre la existencia de "vencedores y vencidos", en el caso de Sagunto, aunque sí afirmó que había sido el Gobierno el que había bajado a los planteamientos de CC OO en el tratamiento de los excedentes. Para Marín, el acuerdo es el mejor desmentido a una filosofía que basaba la reconversión en la destrucción del empleo. En esta línea dijo que el sistema de fondos de empleo recogido en el texto firmado el miércoles recogía exactamente los principios bajo los que tienen que moverse: mecanismos que promuevan la recolocación de los trabajadores afectados.