En estos días
un hecho nos ha conmovido, y no es otro que el ametrallamiento de un barco pesquero por la Marina francesa atentando contra la vida, en un acto llamado terrorismo de Estado, buscando luego una justificación. Es inadmisible que un país ataque a una embarcación a la que lo más que le faltaba para defenderse era la autorización de faenar en aguas comunitarias, es decir, todo fue por un papel que a lo sumo no sé si lo pidieron o hicieron sumisión y empezaron a prepararse como si de guerra se tratase.Lo que más me ha impresionado de los occidentalistas es que, salvo nosotros,, nadie ha tenido la fuerza para denunciar el caso; aquí habría que aplicar el dicho "el que calla otorga". No me ha parecido nada correcta la frase "el trabajador, el pescador al que se le ha amputado la pierna es portugués", considerándolo algunos como poco grave; este hecho no necesitaba adjetivación, se ha atentado contra personas, cualquiera que sea su origen, y menos mal que no hubo muertes... Tampoco se puede comparar este hecho con lo ocurrido respecto al avión surcoreano, ya que aquello sí que supuso una repulsa total por todo el bloque occidental, llegando incluso a reunirse en el seno de las Naciones Unidas, condenando más tarde el hecho; claro que se trataba de la Unión Soviética, y en el caso que nos atañe se trata de una democracia antiquísima y con mucho prestigio en la Europa de los diez. ¿Por qué no se denuncia igual que a la Unión Soviética, habiendo utilizado armas en ambos casos? ¿Es por miedo a represalias o por no haber habido muertes?
Al pueblo francés, no lo considero culpable de esta situación; es tan culpable como los pescadores, y contra ellos no debemos dirigir repulsa alguna. Hay que seguir mejorando, y si con el pueblo francés nos unen lazos históricos y culturales, todo ello está por encima de cualquier atentado aislado que recibamos; es el momento de manifestar nuestro talante democrático aunque sea reciente, demostrando que tenemos otras formas más humanas; de lo contrario, caeríamos en el error de ser como los que atentaron contra nuestros pescadores indefensos. /
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