Serio interés de las multinacionales del petróleo por incrementar sus relaciones con España

Altos directivos de British Petroleum (PB) y Petróleos Mexicanos (Pemex) visitarán esta semana España con el propósito de reforzar las relaciones con instituciones y empresas españolas del sector. Estos contactos hay que sumarlos a los que han realizado o tienen previsto realizar altos representantes de las multinacionales Shell y Basf con fines muy parecidos. Hoy comienza su visita a España el primer ejecutivo de BP, Michael R. Rendle, que se entrevistará con el ministro de Industria, Carlos Solchaga, y almorzará con el presidente del Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH), Claudio Boada.

El hilo conductor de los viajes a España de representantes de las principales empresas mundiales del sector de hidrocarburos es el futuro del mismo dentro del proceso de integración de España en la Comunidad Económica Europea (CEE). La adaptación de la Compañía Arrendataria del Monopolio de Petróleos (Campsa) a la normativa comunitaria -proceso ya iniciado con la firma de un protocolo de intenciones de las empresas españolas de refino el pasado verano- preocupa a las multinacionales petroleras, que temen verse marginadas de los cambios que pueda experimentar el sector tras la adhesión española.El interés de la visita a España del director ejecutivo de BP -máximo responsable de la compañía- ofrece una triple vertiente. En primer lugar se persigue analizar y potenciar la cooperación y proyectos comunes con empresas públicas españolas (con Hispanoil, en Omán; con Eniepsa, en exploración y prospección en España). En segundo lugar es ampliar las semiinterrumpidas exportaciones de gases licuados de petróleo (GLP) de BP a España. Y, por último, recabar información sobre la futura situación jurídica de la venta de aceites lubricantes a España, donde BP ha experimentado una disminución de su cuota.

Compra de acciones

En algunos medios del sector se ha rumoreado que la visita del primer directivo de la empresa británica persigue materializar el interés de esta empresa por un importante paquete de acciones de una sociedad española de refino del sector privado. Personas vinculadas a las dos empresas mencionadas en los rumores mostraron ayer su extrañeza ante la mencionada operación pese al lógico interés que podría tener para una multinacional europea el introducirse en una sociedad española de refino en vista de los cambios que se van a producir en Campsa de cara a la integración de la CEE.

Por su lado, el viaje de Mario Ramón Beteta, presidente de Pemex, a España, aparte de mantener las relaciones habituales con Petróleos del Norte (Petronor), de la que es accionista, guarda estrecha relación con la firma el viernes de un acuerdo de compra de crudo con la refinería española Petróleos del Mediterráneo (Petromed). Esta sociedad, del grupo Banesto, comprará 10.000 barriles/día de crudo mexicano, en una continuación de las intensas relaciones que España tiene, en el campo energético, con México. México se ha convertido en el primer suministrador de crudo de España, sobrepasando a Arabia Saudí e Irán, los dos principales vendedores de crudo de las refinerías españolas. Con este contrato, Petromed hereda los 10.000 barriles de crudo en que se había reducido la cuota de comercio en lo que respecta a los suministros mexicanos.

En cuanto a las conversaciones con la Shell, en fuentes informadas se apunta que el presidente para Europa de esta sociedad había solicitado una entrevista con el ministro de Industria y Energía, Carlos Solchaga, para recabar información de primera mano sobre la reordenación en curso del sector de hidrocarburos. Otro alto ejecutivo de Basf, en la rama petroquímica, visitó recientemente España para ampliar las relaciones con empresas del INH, de cara a la prospección e investigación de hidrocarburos en suelo y plataforma continental española.