Los dirigentes sandinistas descartan hacer concesiones a la oposición nicaragüense

Los dirigentes sandinistas descartaron ayer hacer concesiones a la oposición ante las amenazas de ésta de boicotear las elecciones del 4 de noviembre. Mientras tanto, el Consejo de Estado comenzó a debatir el proyecto de ley electoral, que se espera quede aprobado en marzo.

El coordinador de la Junta de Gobierno, comandante Daniel Ortega, declaró ayer en una conferencia de prensa que la abstención de los partidos de la oposición no puede obligar a hacer concesiones, "más aún si las exigencias de estas corrientes son las mismas que hace la Administración Reagan".Ortega rnanifestó también que el estado de emergencia era consecuencia de las "agresiones desde el exterior" y que sólo podía ser suspendido, gradualmente. Afirmó, no obstante, que en el desarrollo del proceso electoral se darán todas las garantías necesarias en el terreno político y que la oposición tendrá acceso a los medios de comunicación.

Señaló también el dirigente sandinista que el peligro de intervención norteamericana sigue presente y que el reciente nombramiento de Harry Shaudelman como embajador especial de Estados Unidos para Centroamérica "no es un paso que fortalezca el proceso de negociacion en el área, sino que está destinado a potenciar posiciones de fuerza".

Más duro en sus apreciaciones fue el ministro del Interior, comandante Tomás Borge, que estuvo también presente en la conferencia de prensa. Borge dijo que si el presidente norteamericano Ronald Reagan era reelegido "se abre la posibilidad de una amenaza para la paz mundial".

Mientras tanto, el Consejo de Estado inició ayer el debate de la ley electoral que regulará los comicios de noviembre. Los representantes socialdemócrata y socialcristiano (oposición tolerada) se abstuvieron en la votación, mientras el conservador se retiró de la sala.

Los miembros de la oposición tolerada insistieron en que el estado de emergencia debe levantarse inmediatamente, que se libere de la censura a los medios de comunicación y que todos los partidos tengan oportunidades para realizar su propaganda.