Otra misteriosa estafa descubierta en Francia

Cuando aún no se sabe nada, en lo que toca al fondo, sobre la estafa de los aviones husmeadores, otro escándalo salta a la luz pública en Francia: la empresa automovilística nacionalizada Renault perdió 600 millones de francos (10.000 millones de pesetas) como consecuencia de un negocio que semeja al de los husmeadores y parece emparentado con una estafa misteriosa. Pierre Dreyfus, ex ministro de Industria de Mitterrand, era en aquella época presidente de la firma Renault.El argumento del nuevo escándalo es el siguiente: Renault firmó en 1974 un contrato de venta de automóviles con Colombia. Y como parece ser que es corriente en este tipo de negocios con los países que se encuentran en vías de desarrollo, Colombia no pagó con dinero, sino con su materia prima más abundante, el café.

De repente, Renault se dio cuenta de que no era tan fácil como parecía vender el café a un tercero para embolsar el dinero contante y sonante. En este momento crítico, la firma francesa recurre a un personaje con el que ya había mantenido relaciones comerciales. Se trata de Máxime Hilderbrand, que en otras ocasiones había hecho operaciones similares con la fábrica de coches.

En esta ocasión, Hilderbrand le propuso a Renault un método milagroso para deshacerse del café, es decir, para convertirlo en dinero: es cuestión de un procedimiento de liofilización del café (convertirlo en nescafé) que es propiedad suya, ya que se lo había comprado a un grupo alemán. Dicho y hecho: Renault, guiada por su hombre-esperanza, empezó a gastar dinero para construir fábricas de liofilización en Bélgica y en Cerdeña.

Así fue como la Renault empezó a gastar dinero sin saber muy bien a dónde iba a parar, durante dos años. Finalmente intentó vender las fábricas. Sólo lo consiguió en Bélgica, donde una de sus factorías de nescafé fue prácticamente regalada por 23 millones de francos, pagables el año 2010.

Hilderbrand se supo después que era portador de un pasado en el que figuraban delitos varios, como el contrabando. Los dirigentes de la firma de coches, de hoy y de ayer, podrían ser interrogados rápidamente por los representantes de la justicia. Entre ellos se encuentra Dreyfús, que fue el primer ministro de Industria del Gobierno socialista de François Mitterrand.