La deuda de las suspensiones de pago instadas en Cataluña fue de 80.000 millones en 11 meses
En los 11 primeros meses del presente año, la masa deudora de las empresas que instaron suspensión de pagos o quiebra en los juzgados catalanes asciende a 80.500 millones de pesetas, esperándose que al concluir 1983 se alcance la cota de 85.000 millones.En enero-noviembre, el número de fallidos ha aumentado en un 37% sobre 1982, mientras el volumen acreedor lo ha hecho en un 27,2%, según un estudio elaborado por Cinco días.
La cifra alcanzada en los 12 meses de 1982 ya fue igualada al concluir el pasado mes de septiembre con 64.000 millones de pesetas. Estas cifras baten todos los récords registrados en Cataluña y podrían suponer prácticamente la cuarta parte del total nacional.
El mes con mayor volumen acreedor fue marzo, dada la abultada suspensión del grupo papelero Torras (Torras Hostench e Industrial Cartonera) con un pasivo conjunto de 23.333 millones, la de mayor volumen registrada en Cataluña en todos los tiempos. A continuación se sitúan el textil Puigneró con 9.433 millones, Rocalla, 1.878, el grupo gerundense Grau Font, 1.85,0, Invesa, 1.817, Resintes, 1.714, Acerasa, 1.708, Torras Domenech, 1.597 y Coesa 1.498 millones. Los sectores más perjudicados por el número de empresas suspensas han sido: maquinaria, textil, construcción y electrónica.
En la actualidad, y a la espera de la próxima ley concursal, cuya entrada en vigor está prevista a lo largo de 1984, la normativa jurídica que afecta a las empresas en lo concerniente a la suspensión de pagos es de julio de 1922 sobre "expedientes de suspensión".
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