El Gobierno aplicará "criterios políticos" a sus compras en Francia, afirmó ayer Felipe González a la Prensa

El presidente Felipe González dijo ayer que "desde el punto de vista del Gobierno español no cabe duda de que habrá criterios políticos y no sólo económicos, en las compras a nivel internacional". El jefe del Ejecutivo, a la vez que negaba de forma genérica a los periodistas que el Gobierno haya tomado la decisión de congelar las compras en Francia, añadía que "hará sus cálculos y los estudios oportunos en los contratos de Defensa para proteger los intereses generales de España".

El presidente del Gobierno fue preguntado en el Congreso por varios periodistas sobre la información publicada por este diario ayer, en la que se decía que el Gobierno había ordenado un estudio escalonado de todas las licencias y contratos pendientes con Francia, dentro del comercio de Estado, con el fin de que, en el futuro, se globalicen esas compras. Al mismo tiempo, y como consecuencia de una decisión, discutida y aprobada en Consejo de Ministros, aunque no hecha pública por razones obvias, la información señalaba que algunos productos que se iban a adquirir de trámite en Francia -leche fresca y sementales- habían sido congelados de momento.La frustración que se ha ido acumulando en los últimos meses en el seno de la Administración socialista ante la falta de cooperación francesa en el problema del terrorismo y ante los obstáculos para el ingreso de España en el Mercado Común, han llevado al Gobierno al convencimiento de que es necesario adoptar unos criterios realistas, como hacen el resto de los Gobiernos, que permitan conseguir unas negociaciones igualitaris y unas contraprestaciones equitativas. Hasta ahora, el comercio de Estado con Francia y con la mayoría de las naciones ha seguido una línea sectorial y por tanto falta de control, lo que ha hecho perder muchas bazas negociadoras al Estado. La historia de las relaciones comerciales del Estado español está plagada de ejemplos en los que un determinado ministerio del Gobierno hacía sus concesiones de licencias o contratos, por su cuenta, con otro ministerio extranjero o con empresas públicas o semipúblicas de otros países.

El ordenar ahora una globalización de las relaciones comerciales con todos los Estados, y en especial con Francia, donde se hace más necesario, como reconoció ayer Felipe González, aplicar "criterios políticos", permitirá que en las futuras mesas de negociación estén presentes todos los paquetes de ofertas y todas las exigencias de contrapartidas. piara salvaguardar los intereses españoles.

En sus declaraciones improvisadas ayer a la Prensa, Felipe González, habló en términos generales (sin precisar a que comercio se refería) cuando aludió a que no se han bloqueado las relaciones comerciales con Francia o no se han congelado las importaciones de dicho país. Pero, cuando quiso precisar, utilizó las siguientes expresiones: "Desde el punto de vista del Gobierno español no cabe duda de que habrá criterios políticos y no sólo económicos, en las compras a nivel internacional", según recogió la agencia Efe. "España debe mantener un buen clima de relaciones con Francia, pero de forma recíproca y bilateral entre todos los países", añadió.

Tanto Efe como Europa Press recogen las palabras del presidente al ser preguntado si la decisión afectará a los contratos pendientes de Defensa con estas palabras: "El Gobierno hará sus cálculos, como lo hacen todos los gobiernos. No digo que los contratos de Defensa se vayan a ver o no afectados por estos cálculos, sino únicamente que haremos los estudios oportunos en defensa de los intereses generales de España"`.

Ni la oficina del portavoz del Gobierno, ni la de Asuntos Exteriores, hicieron ayer ningún comentario oficial a la información de EL PAIS y remitían a las declaraciones efectuadas por el presidente González.

Sin comentarios de la embajada de Francia

La embajada de Francia, que interpretó las declaraciones de Felipe González como un mentís, facilitó un comunicado al mediodía en el que se afirmaba lo siguiente: "La Embajada de Francia no tiene ningún comentario que añadir al desmentido del presidente del Gobierno español a propósito de las informaciones (en cursiva en el original) de un periódico de la mañana sobre las relaciones comerciales hispano-francesas. Este desmentido, muy claro, no permite ninguna interpretación. Los servicios de prensa de la Embajada de Francia quedan a la disposición de los periodistas que deseen disponer de informaciones serias y auténticas sobre el estado de las relaciones -comerciales y otras- entre España y Francia".las importaciones previstas de leche fresca, cereales y sementales de vacuno seguirán su curso normal, sean de Francia o de otros países vendedores, según señalaron a la agencia Efe fuentes del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Respecto a la globalización de las relaciones bilaterales, que supondría la paralización del comercio de Estado con Francia, fuentes de la secretaría de Estado de Comercio manifestaron a Efe que "no hay ninguna aclaración, ni ningún comentario".

La agencia estatal titulaba anoche un comentario resumen sobre la información de EL PAIS: "Desconcierto sin desmentidos bloqueo comercio con Francia" e iniciaba la información con este texto: "Aunque el presidente Felipe González dijo hoy en Madrid que su Gobierno 'no ha decidido' bloquear el comercio de Estado con Francia, en el aire quedó tal posibilidad, ya que esas compras se realizarán, según matizó, "con criterios políticos y no sólo económicos".