Los imponderables del golfo Pérsico
The New York TimesDesgraciadamente, es posible imaginar que un Irán enfurecido, y humillantemente amenazado en los tres años de guerra con Irak, llegue a cerrar el golfo Pérsico al tráfico de petroleros. (...)
Es inimaginable, por el contrario, que el mundo no conítinista, que recibe la cuarta parte del Petróleo que consume de los países productores del Golfo, pueda tranquilamente permitírselo.
El presidente Reagan ha manifestado lo fundamental de su posición en muy pocas palabras: no cree que Estados Unidos y sus aliados permitan que nadie cierre el estrecho de Ormuz. ( ... ) La incertidumbre con respecto a la respuesta occidental puede no disuadir a Irán de llevar a cabo su venganza, pero es un imponderable con el que hay que contar.
Irán debe tener en cuenta, en primer lugar, que ésta es una época baja en el golfo Pérsico: hay grandes reservas acumuladas y la economía energética mundial podría soportar sin sobresaltos un corte temporal de suministros. Por otra parte, los suministros saudíes pueden enviarse por medio de un nuevo oleoducto en el mar Rojo, sin olvidar, que la reserva estratégica norteamericana -estimada en 350 millones de barriles- puede utilizarse para evitar un pánico de los compradores y la correspondiente subida de precios. ( ... )
Si Irán corta sus ventas petroleras corre el riesgo de ir a la bancarrota y de arrastrar a Irak tras de sí. Por eso, cuando el ayatollah amenaza, el mundo ya ha aprendido a escucharle. ( ... )
Aún permanece en secreto lo que con grandes reservas y restricciones ha vendido Francia a Irak. A Francia le preocupan el comercio y la deuda iraquíes, pero está claro que no desea que una de las dos naciones arrase a la otra o ampliar las dimensiones actuales del conflicto. Ya hay bastantes armas y conflictos en la región. Sin embargo, aunque Irak ha abandonado sus pretensiones territoriales, las mismas que provocaron el comienzo de la guerra, Irán insiste en que no puede haber paz mientras no haya un nuevo régimen en Bagdad. Hasta ahora, todo intento de mediación ha sido infructuoso. Al ayudar a Irak en un momento desesperado, Francia intenta poner fin una vez más a una guerra carente de sentido. Pero para eso necesitará de mucha más ayuda.
24 de octubre
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