EE UU desplegará los misiles Pershing 2 aunque haya acuerdo en Ginebra, según 'Izvestia'
Estados Unidos no renunciará a los misiles Pershing-2, cuyo despliegue en la República Federal de Alemania (RFA) está previsto que empiece a finales de año, "incluso si se llegase a un acuerdo con la URSS sobre la reducción de armamentos", afirma el diarid Izvestia, órgano del Gobierno soviético.
"EE UU insistirá sobre el despliegue incluso si Europa occidental se inclina hacia una verdadera opción cero, en virtud de la cual la URSS se comprometería a retirar sus cohetes SS-20 de la parte europea de su territorio", escribe el observador político del diario, Valentín Faline.En opinión del comentarista, los proyectos para desplegar los Pershing-2 son muy anteriores a la instalación de los SS-20 y ha sido el perfeccionamiento del sistema de defensa antiaéreo soviético lo que ha servido para justificar desde el punto de vista militar el despliegue de estos cohetes y de los de crucero. "No se trata de que aumente la vulnerabilidad de Europa occidental", asegura Faline.
Los Pershing-2 se instalarán, si antes no se llega a un acuerdo en las conversaciones de Ginebra, en territorio de la RFA, donde las organizaciones pacifistas preparan una gigantesca campaña de protesta civil que se desarrollará en los próximos meses. El 22 de octubre está prevista, por ejemplo, la formación de una gigantesca cadena humana en torno al barrio del Gobierno, en Bonn.
Sin embargo, el canciller Helmut Kohl no espera un otoño caliente, o al menos eso afirmó ayer en unas declaraciones a una emisora de radio de su país. "Tenemos Un Estado de derecho", dijo, "que sabe defenderse de los ataques contra el orden constitucional", informa Efe.
La presencia de armamento nuclear norteamericano en territorio de la RFA ha suscitado ya en el pasado agrias polémicas. Ayer mismo, el vicepresidente del grupo parlamentario socialdemócrata, Horst Ehmke, salió al paso de la posibilidad de que Alemania Occidental pueda corresponsabilizarse algún día de las armas atómicas estadounidenses estacionadas en su territorio. En declaraciones a una emisora de radio, Ehinke dijo que no sería bueno para la paz el que un país dividido, en pleno corazón de Europa, se convirtiese indirectamente en potencia atómica.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.