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La situación en Centroamérica, tema clave del encuentro de los dirigentes de México y EE UU

Ronald Reagan y Miguel de la Madrid sostienen hoy su segunda entrevista personal, primera de ambos como presidentes en ejercicio. En la agenda que trae el mandatario mexicano hasta esta ciudad de La Paz, en el Estado mexicano de Baja California Sur, sobresale el tema de la crisis centroamericana y la forma de encontrarle una solución pacífica.

"La posición mexicana está contenida en la declaración de Cancún, firmada por los cuatro presidentes que integran el grupo de Contadora", dijo en vísperas del encuentro un alto funcionario de la cancillería mexicana.Aunque el conflicto que tiene como ejes principales a El Salvador, Honduras y Nicaragua sigue preocupando a México, el presidente De la Madrid podrá enfrentarse al menos a su colega norteamericano con algunos puntos a su favor, como la disposición de Nicaragua a aceptar negociaciones multilaterales para encontrar una base de acuerdo pacífico.

Miguel de la Madrid podrá argumentar también el significativo apoyo que recibió la propuesta del grupo de Contadora por parte de Fidel Castro, cuando éste se mostró dispuesto a retirar a sus asesores militares de Nicaragua y reducir el envío de armas a la región si Estados Unidos se comprometían a hacer lo mismo.

¿Espera el presidente mexicano escuchar algo semejante por parte de Ronald Reagan? Funcionarios mexicanos sostienen que la gestión de Contadora ha tenido éxito y que el Gobierno norteamericano no ha cerrado sus oídos a la declaración de Cancún, a pesar del envío de su flota a aguas centroamericanas.

México sigue dando fe al apoyo público que Estados Unidos ha prestado a las gestiones del grupo de Contadora. Una muestra de buena voluntad han sido los contactos diplomáticos que la Administración Reagan ha mantenido con todos los países del grupo. Pero el dato fundamental que habla a favor del foro de Contadora es que, a pesar de la gravedad de los acontecimientos en la región centroamericana, ha impedido hasta ahora el estallido de un conflicto bélico. "Sin Contadora", dijo en México un alto funcionario, "ya habría un conflicto armado en la zona".

A pesar del ofrecimiento cubano de retirar sus asesores y cortar el suministro de armas, el tema sigue teniendo para México una dificil solución a corto plazo. Según los diplomáticos mexicanos, el tráfico de armas (se refiere al que se dirige desde NIcaragua a El Salvador) ha perdido importancia. La guerrilla salvadorefia, dicen, tiene como principales fuentes de suministro el mercado negro, que fomenta el propio Ejército salvadoreño, y la incautación de armas en los enfrentamientos.

El problema de los asesores sólo podrá resolverse si se encuentran condiciones pacíficas simultáneas, opinan en México.

Frente a la política de mano dura de Estados Unidos, el presidente De la Madrid hará valer el consenso internacional obtenido por el grupo de Contadora. No se puede descartar que en sus conversaciones con Ronald Reagan el presidente de México ofrezca sus buenos oficios para servir de intermediario en un posible acercamiento entre Cuba y Estados Unidos.

Fidel Castro ya ha dicho que no tendría inconveniente, si se presentara la posibilidad, de conversar con Reagan. Funcionarios del Departamento de Estado han manifestado, por su parte, que siguen sondeando esta posibildad.

La posición de México al respecto la ha explicado un funcionario mexicano que estará presente en la reunión presidencial de hoy en los siguientes términos: "Si Cuba lo pidiera, estaríamos dispuestos a servir de intermediarios para este diálogo, pero hasta ahora nada se nos ha pedido".

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