Arafat pide a varios jefes de Estado árabes que detengan la "agresión sirio-libia" en la Bekaa

Yasir Arafat, presidente del comité ejecutivo de la Organización para la Liberación de palestina (OLP), dirigió ayer mensajes urgentes, a varios jefes de Estado árabes, invitándoles a intervenir para detener la "agresión sirio-libia" contra la resistencia palestina en el valle libanés de la Bekaa. Estos mensajes fueron dirigidos a los presidentes de Argelia, Tunicia, Irak, Yemen del Norte y Yemnen del Sur, así corno al rey le Arabia Saudí, al emir de Kuwait y al secretario general de la Liga Arabe.

Según la agencia palestina Wafa, en estos mensajes Arafat acusa a las fuerzas sirias y a sus aliados del FPLP-CG (de Ahmed Jibril), así como a las fuerzas libias, de sostener militarmente a los disidentes de Al Fatah, de haber abierto fuego en dirección de las posiciones palestinas en la Bekaa, así como de haber detenido algunos cuadros militares leales la dirección oficial de la OLP.También ayer, con anterioridad a hacerse público el envío de los mensajes de Arafat, un portavoz de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) acusó a Siria, en un comunicado emitido en la ciudad Ebanesa de Trípoli, de apoyar militarmente con su ejército estacionado en la llanura de la Bekaa (Líbano) a los milicianos amotinados contra la actual dirección de la resistencia palestina. El domingo pasado, otro portavoz había denunciado también el respaldo prestado por el contingente libio de la Bekaa a los fedayin sublevados.

Los elementos opuestos al liderazgo actual de la OLP han ampliado la zona bajo su control en la Bekaa, según fuentes disidentes palestinas y confirmaron otras leales a Yasir Arafat.

Los fedayin insurrectos se apoderaron en la madrugada de ayer, al término de dos horas y media de combate, de las localidades de Masnaa, Majdel Anjar y Deir Zannun, cercanas a la frontera con Siria, y consiguieron establecer un control en la carretera internacional que Beirut-Damasco, según la radio estatal Ebanesa. Carros de combate de las fuerzas armadas sirias abrieron fuego junto con los combatientes insubordinados, para facilitar su avance.

El control sobre un trozo de la carretera que ejercen los milicianos alarga las comunicaciones entre las fuerzas fieles a Arafat, instaladas en Trípoli, las que acampan en el oeste de la Bekaa y la retaguardia que está situada en territorio sirio. El propio Arafat tuvo que pasar ayer por Homs y efectuar así un rodeo de más de un centenar de kilómetros al desplazarse de Damasco a Trípoli.