La neutralidad de España, "inaceptable para los occidentales", según Morán

ENVIADO ESPECIALEl ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, rechazó ayer en Bonn la fórmula de la neutralización de España para un referéndum sobre la OTAN, pues "resultaría inaceptable a los occidentales". A título personal, referéndum como su preferida la de "participación de España en la defensa occidental". Respecto a la fecha, precisó que "no es cuestión de meses ni de un año y medio o dos. El plazo razonable sería el del despliegue de los euromisiles".

Morán se encontraba en Bonn para una sesión de trabajo con sus colegas alemanes y otros en el marco de la cooperación política que España mantiene con la CEE. Se entrevistó también con su homólogo portugués, Jaime Gamma, y con el ex canciller alemán Willy Brandt. Morán partió vía Londres hacia Washington para acompañar en su viaje oficial al presidente del Gobierno. El ministro español celebró un desayuno de trabajo con la prensa, en el curso del cual manifestó que diversos países establecen una relación entre el ingreso de España en la CEE y su permanencia en la OTAN: "Unos, por intereses directos propios, y otros, por tropismo", añadió mencionando a ltalia.

En el contexto de su viaje a Estados Unidos, señaló que "la situación actual de España en la Alianza Atlántica es aceptada. No nos meten prisa, pero esperan una decisión en un tiempo razonable. No se puede esperar 25 años", continuando con las palabras ya citadas.

Morán rechazó la existencia de una presión diplomática sobre España en el tema de la OTAN, "aunque quizá se dé a través de ciertos medios de comunicación. No lo sé". "Deben prever que el resultado de su presión sería un referéndum negativo". Morán admitió que tal sería también el resultado de referendos sobre la permanencia en las alianzas tanto en los países de la OTAN como del Pacto de Varsovia. El ministro español reconoció la existencia de una presión por parte de la opinión pública española, "que podría agravarse en el próximo año o año y medio".

A una pregunta sobre la presión que hubiera podido ejercer EE UU a través de Rabat, Morán comentó que "podían haber utilizado a Marruecos como palanca. Pero han mejorado las relaciones entre España y Marruecos, y en la medida en que tengamos buenas relaciones Marruecos es menos dependiente de Estados Unidos. No le interesa ser un satélite", especialmente ante la política en Oriente Próximo.

Morán señaló que va a hablar con el secretario de Estado norteamericano, George Shultz, sobre el tema de Gibraltar para que no haya malentendidos "ni que la señora Thatcher nos pueda presentar como gente que ponga en peligro las estabilidades". Morán ha escrito ya a Shultz sobre este tema. "No es cierto que no aceptamos como base de negociación el acuerdo de Lisboa, sino su interpretación". Morán añadió que "no aceptamos el intercambio de cartas del 10 de enero de 1982, con el cual el Gobierno de Calvo Sotelo se entregó a los británicos". En sus discusiones en Bonn, Morán abordó el tema de Centroamérica -que volverá a tratar en Washington- y el de la Conferencia de Madrid.