El Estado invertirá este año 250.000 millones de pesetas en la modernizacion de las Fuerzas Armadas

Los proyectos de modernización de las Fuerzas Armadas supondrán este año unos gastos cifrados en 252.538 millones de pesetas, cantidad que corresponde en 1983 a los tres Ejércitos, de acuerdo con la ley de Dotaciones Presupuestarias para Inversiones y Sostenimiento de las Fuerzas Armadas, aprobada el año pasado.

La cantidad fijada inicialmente en ese concepto era de 262.264 millones de pesetas, pero fue rebajada en 9.725 millones, debido a las directrices marcadas por el Gobierno para reducir el gasto público. De los 252.538 millones, 128.259 serán destinados a inversiones reales, 82.194 a compra de bienes y servicios, 34.691 a gastos de personal, 3.349 a pasivos financieros, 3.206 a transferencias de capital, 634 a transferencias corrientes, y 206 a activos financieros. En la distribución por Ejércitos, 114.051 millones de pesetas corresponderán al Ejército de Tierra, 72.915 a la Armada, 54.080 al Ejército del Aire, y el resto, 11.493 millones, al órgano central de la Defensa.Según el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado, los créditos globales que este año serán dedicados al capítulo de defensa ascienden a 478.333 millones de pesetas, lo que supone un incremento de 69.050 millones (16,97%) respecto a la cantidad establecida para 1982, que fue de 409.283 millones. Los gastos de defensa previstos para este año suponen el 10,6% de los Presupuestos Generales del Estado. Este porcentaje, que el pasado año fue 11,6%, ha ido descendiendo paulatinamente en la última década.

Los créditos asignados al Ministerio de Defensa en los Presupuestos Generales del Estado proceden de tres fuentes. La primera es la que se deduce de las previsiones contenidas en la ley de Dotaciones Presupuestarias para Inversiones y Sostenimiento de las Fuerzas Armadas, aprobada el pasado año, y que en los créditos para este año supone 252.539 millones, fundamentalmente dedicados a la modernización de los Ejércitos. La segunda fuente se deriva del Plan Plurianual de Inversiones Públicas, que este año supone 11.329 millones. En la tercera figuran todos los créditos no incluidos en la ley de dotaciones ni en el programa plurianual, y este año asciende a 214.465 millones, dedicados casi en su totalidad a gastos de personal.

Gastos de personal

Algo más del 50%. de los gastos de defensa, exactamente 246.076 millones, han sido destinados a gastos de personal, mientras las inversiones y compras de bienes y servicios ascienden a 226.658 millones de pesetas. El resto, 5.599 millones, corresponden a pasivos y activos financieros y a transferencias corrientes.

La cifra correspondiente a los gastos de personal supone un incremento de 38.556 millones de pesetas (18,57%) respecto a los 207.520 millones del pasado año. Los gastos de personal de defensa representan el 18,1% del total de gastos de personal para toda la Administración. El aumento experimentado respecto al pasado año está justificado en el proyecto de presupuestos, fundamentalmente, entre los 18.439 rnillones de incremento salarial autorizado, los 7.006 destinados a los militares que están en la reserva activa, los 3.557 dedicados al personal de tropa con más de dos años de servicio y los 2.405 para complementos de diversas clases. También se incluyen los 12 millones en que se han visto incrementadas las dotaciones a los nuevos altos cargos y los 11 millones destinados a gastos de representación.

Tras el de personal, el capítulo de gastos que mayor incremento total ha registrado respecto al pasado año ha sido el de adquisición de bienes y servicios, que pasa de 61.852 millones a 82.996, es decir, un 34,18% más. La parte más importante del inciremento (20.996 millones sobre 21.144) corresponde a los créditos derivados de la ley de Dotaciones para las Fuerzas Armadas, aprobada el pasado año para potenciar la modernización de los Ejércitos. Una parte mínima del aumento, 100 millones de pesetas, aunque significativa, corresponde al incremento registrado en la partida dedicada a gastos reservados del Centro Superior de Información de la Defensa (CESID), que este año se elevarán a 801,8 millones de pesetas. La Junta de Jefes de Estado Mayor (JUJEM) también dispondrá este año de 87,4 millones de pesetas en concepto de gastos reservados.

El tercer capítulo que sufre mayor incremento es el de' inversiones reales, ya que la cantidad asignada en el presupuesto de este año es de 137.898 millones, frente a los 123.911 de 1982.

En términos generales, y dentro de la clasificación general del presupuesto del Estado, cabe señalar que, en el capítulo de compras de bienes y servicios, 90.774 millones serán destinados a adquisiciones civiles y 82.996 a compras militares, es decir, un 47,8% del total. Igualmente, las inversiones reales del Estado ascenderán a 408.505 millones de pesetas, de los que 137.898 corresponden a inversiones militares.

Respecto a los gastos corrientes del Ministerio de Defensa, los técnicos que han elaborado el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado han puesto de relieve que dichos gastos, como ha ocurrido a lo largo de los últimos años, se han visto incrementados de forma superior al del resto de ministerios. Asimismo, en el capítulo destinado a conservación y reparación de inversiones tienen un gran peso los créditos destinados al mantenimiento de armamento y material de guerra, que ascienden a 21147,6 millones de pesetas, distribuidos en 9.688 millones para el Ejército de Tierra, 4.111,1 para la Armada y 8.347,6 para el Ejército del Aire.

El Ejército del Aire, discriminado

En términos relativos, la distribución del presupuesto de Defensa entre los tres Ejércitos será, aproximadarnente, del 54% para el Ejército de Tierra, 24% para la Armada y 22% para el Ejército del Aire. Durante las reuniones mantenidas por los miembros de la Junta de Jefes de Estado Mayor para discutir la distribución de presupuestos, se registraron fuertes tensiones entre sus componentes, protagonizadas fundamentalmente por el jefe del Estado Mayor del Aire, teniente general Emilio García Conde, quien entiende, según fuentes próximas al mismo, que su Ejército está siendo discriminado en los últimos años, sobre todo en beneficio del de Tierra.

En este sentido, el ministro de Defensa, Narcís Serra, anunció hace varias semanas que éste será el último año en que la distribución presupuestaria interejércitos se realice porcentualmente. A partir del año que viene, señaló, la distribución se realizará de acuerdo con una selección de los programas de inversiones que presente cada Ejército.