Una exposición de Saura abre el 5º aniversario de la Casa de España en París

La Casa de España en París celebró el quinto aniversario de su existencia con la despedida oficial del que fue su creador, Vicente Valero, nombrado semanas atrás gobernador de Tarragona, y con una exposición de Antonio Saura, inaugurada por el embajador español, Miguel Solano, y presentada con un poema de Alberti. Alrededor de 2.500 personas asistieron a los actos, que patentizaron el éxito global de las tareas de este centro hispánico.

"Y esto soy yo: lo que quedara en un espejo después de chorreado, embadurnado, enjuagado o engarabintintado con esponjas de alambres, arañado con garfios de metal, triturado, raspado, apedreado, ensaurecido hasta lo último, hasta ese momento en que me surjo yo, Saura". Lo transcrito corresponde a Saura, visión memorable, poema de Rafael Alberti, editado en un cuaderno conmemorativo ilustrado por el pintor, y que sirvió de presentación a la exposición con la que la Casa de España en París celebró el quinto aniversario de su existencia.Este acto centró la atención de las 2.500 personas que aproximadamente la tarde del viernes pasado abarrotaron las cinco plantas, las escaleras y hasta las inmediaciones de la Casa de España. Para esta última, el que un pintor de talla internacional salte la barrera de los posibles prejuicios y realice una exposición en sus salas, supone el inicio de una etapa cultural abierta, no sólo al público hispánico, sino al mundo de la cultura.

Saura, el pasado mes de octubre, aceptó la invitación del director de la Casa de España, Valero, "porque me pareció interesante y simpático exponer mis cuadros en un ambiente que no es el tradicional del mundo pictórico. Sólo había ido una vez a la Casa, pero el ver tanta gente leyendo periódicos, visitando la exposición de turno, o bebiendo un vaso en el bar me pareció importante. Y, sin más, acepté".

Por primera vez, el nombre de Saura llevó a la Casa de España a críticos, pintores y visitantes franceses. Y, por primera vez también, el cartel anunciador se ve en París. El pintor no respiraba, atendiendo las preguntas de los emigrantes sobre su persona y sobre la selección de su obra de los últimos diez años, expuesta en dos salas de la Casa de España: "Todo lo que me preguntaban se refería a la significación de los cuadros. Eran interrogantes de quien no entiende de pintura, pero eran preguntas simples, esenciales".

Valero, el ya ex director de la Casa de España, resaltó una vez más la doble vertiente de la evolución de este centro que cada semana recibe a más de 3.000 personas: la dimensión cultural y la de plaza mayor, donde la gente se reúne. En sus cinco años de vida, la Casa ha realizado 92 exposiciones y su biblioteca cuenta con 1.100 lectores. Se han celebrado semanas culturales de Andalucía, Galicia, País Valenciano, Aragón, y la Casa de España participó también en la quincena catalana de la Unesco.

El presupuesto anual de la Casa de España en París es de cuatro millones de pesetas. El coste de algunos de los actos celebrados ha superado esa cantidad. En cada ocasión, las diputaciones, bancos u otras entidades colaboran en los gastos.