Los misiles MX y la URSS, temas de la alocución de Reagan
La petición al Congreso para que apruebe el plan de construcción de cien nuevos misiles intercontinentales del tipo MX, junto al recuerdo hacia la Unión Soviética para que "se una a nosotros con fin de progresar en el control de armamentos" fueron los dos temas principales de la alocución televisada del presidente norteamericano, Ronald Reagan.Reagan justificó la necesidad de los MX debido a la "vulnerabilidad" para Estados Unidos que supone "el crecimiento del poderío militar soviético". "Esa decisión de instalar los MX apoya y complementa la visión de EE UU en materia de control de armamento", agregó el presidente, porque "mantiene la credibilidad de contención" de las armas norteamericanas. Pero, prosiguió Reagan, "continuamos en nuestras propuestas para una reducción importante de armas nucleares entre ambas partes", denominando a los MX como misiles "mantenedores de la paz".
Cara a los soviéticos, poco ha variado hasta el momento la postura de la Administración Reagan tras la muerte de Leónidas Breznev y la llegada al poder de Yuri Andropov. Reagan sostiene que la firmeza es el mejor argumento para incitar a los soviéticos a la negociación, manteniendo al mismo tiempo que la iniciativa debe llegir por parte de Moscú. Con ejemplos prácticos, como sería un cambio de política soviética respecto a Afganistán, una suavización de las tensiones en Polonia y, sobre todo, una aceleración en dirección a las tesis americanas en las negociaciones sobre el control de armas convencionales y estratégicas.
El Congreso debe aprobar el programa de Ios MX antes del próximo 1 de diciembre. Sin embargo, por su elevado coste (cifrado en unos 215.000 millones de dólares, es decir, más de dos billones y medio (le pesetas) y por sus dudas y la eficacia de los MX, el tema podría ser rechazado por el Congreso.
La movilización de la opinión pública norteamericana ante el peligro de una guerra nuclear, expuesta en las últimas elecciones al Congreso y reforzada por la reciente pastoral de los obispos católicos americanos, no son tampoco factores extraños a las dificultades que tendrá Reagan para obtener el acuerdo del Congreso. Todo ello, en un contexto de un déficit presupuestario de unos 200.000 millones de dólares para el ejercicio de 1984.
Eventual ataque
Los expertos militares del Pentágono consideran que EE UU debe sustituir a los superados misiles intercontinentales Minuteman y Titan para poder hacer frente a un eventual ataque nuclear soviético contra EE UU.
El MX es un misil con un radio de acción de unos 12.000 kilómetros, capaz de alcanzar cualquier objetivo en el amplio territorio soviético. Montado en un cohete en cuatro estadios el MX lleva simultáneamente diez cabezas nucleares, capaces de dispersarse hacia diferentes objetivos. Es el misil más sofisticado, sin equivalente, por el momento, en los arsenales de la URSS, según los técnicos norteamericanos.
¿Dónde colocarlos?, ¿cómo instalarlos? y, sobre todo, ¿cómo defenderlos? Tales son los interrogantes que han planeado en la larga polémica de más de cinco años de historia del proyecto MX. Finalmente, previo estudio de todas las opciones, el presidente Reagan opta por el denominado paquete denso, equivalente a colocar los cien misiles MX en una fila de silos subterráneos, a lo largo de unos veinticinco kilómetros, en las cercanías de la base aérea de Warren, en el Estado de Wyoming. Nevada y Nuevo México figuraron entre las posibles áreas para colocar los MX, siendo descartadas debido a la fuerte oposición política y popular. La totalidad de los cien MX será operacional a partir de 1986.
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