El Parlamento colombiano amnistía a presos políticos y guerrilleros

Colombia inició el pasado martes un proceso de pacificación política con la promulgación por el Parlamento de una ley de amnistía que beneficia a 250 de los 346 detenidos políticos y afecta a unos 6.000 guerrilleros.

La ley, que sustituye a otra promulgada por el ex presidente Julio Turbay Ayala, fue presentada por el que fuera candidato a la presidencia por la coalición socialista-comunista, Gerardo Molina, y fue aprobada casi unánimemente, después de sufrir algunas modificaciones del primer mandatario del país, Belisario Betancur.En su primer artículo, la ley concede la amnistía a los autores, cómplices o encubridores de delitos políticos perpetrados antes de la entrada en vigor de esta ley y el sobrescimiento de los procesos contra quienes están acusados de "levantarse en armas".

El texto legal prevé penas de entre dos y cinco años para aquellas personas que importen, fabriquen, reparen, oculten o adquieran armas de uso militar, lo que se interpreta como una orden de entrega de las utilizadas por quienes militan en grupos guerrilleros.

Además, la ley indica que quienes en su día lucharon contra el Gobierno y quedan ahora amnistiados obtendrán subvenciones estatales para la educación, vivienda, agricultura y sanidad.

El ministro de Defensa colombiano, general Fernando Lanzabal, y su colega del Interior, Rodrigo Escobar, calificaron la ley y el voto casi unánime de la Cámara de "buena noticia para el país y una esperanza para los colombianos".

La ley fue votada por 174 votos a favor y cuatro en contra. En el edificio parlamentario se encontraban las madres de algunos de los detenidos políticos, que no pudieron contener sus lágrimas cuando se sancionó la aprobación de la amnistía.

Solamente el grupo guerrillero Movimiento 19 de Abril (M-19) y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, prosoviéticas) han aceptado los beneficios del indulto, pero no han decidido previamente deponer sus armas a las autoridades.

Por su parte, el Ejército Popular de Liberación (EPL, maoísta), el Ejército de Liberación Nacional (ELN, castrista) y sus guerrillas urbanas, junto con el Movimiento de Autodefensa Obrera (ADO, trotskista) han rehusado todos los términos de la amnistía y decidido proseguir con la lucha armada.

Tales grupos reclaman profundos cambios económicos y sociales, así como el desmantelamiento de los grupos paramilitares, a quienes se acusa de asesinar al menos a 70 personas en connivencia con mandos militares.

Violentos combates

Simultáneamente a la aprobación de la ley, se produjeron violentos combates en el sur del país, que ocasionaron 16 muertos (15 guerrilleros y un teniente del Ejército).Según emisoras oficiales, unos 200 guerrilleros, pertenecientes al Movimiento 19 de Abril, intervinieron en estos combates que se desarrollaron en la región de Santiago de la Selva, a unos 500 kilómetros al sur de la capital.

El problema planteado para la aplicación de la amnistía reside en la voluntad de los guerrilleros para entregar sus armas, condición imprescindible, según el Gobierno, para aplicar el perdón.