Más de un metro de agua en las calles de la parte baja de Algemesí
En la parte más baja de Algemesí, que ayer permanecía inundada, con alturas de más de un metro de agua sobre el nivel de las calles, algunos vecinos construyeron pequeños muros de ladrillo a la puerta de sus casas el miércoles por la tarde, porque aún recordaban la riada que asoló Valencia en 1957 y temían que se reprodujese. Esa zona permanecía ayer aislada y se estaba procediendo al abastecimiento de alimentos y al rescate de personas mediante helicópteros.
Por carretera se podía llegar a esta población en dirección hacia la zona más afectada, en el centro de la cual está Alcira, a cinco kilómetros de Algemesí, que se encontraba incomunicada. En el trayecto de Valencia a Algemesí se observaban numerosos camiones parados en la carretera porque no podían proseguir, dado que las vías principales estaban cortadas y les era imposible circular por los caminos vecinales, practicables para los turismos.En algunas zonas, los huertos de naranjos estaban completamente inundados, y en otras se veían los frutos en tierra, desprendidos por la fuerza de las aguas o caídos porque las inundaciones han impedido continuar con normalidad las tareas de recolección.
La riada importante no llegó a Algemesí hasta la medianoche del miércoles. Desde ese momento, los habitantes permanecieron en la calle observando el nivel de las aguas, por miedo a que una fuerte inundación les sorprendiese en la cama.
Las calles del centro de la ciudad estaban ayer repletas de barro, en algunos lugares con un palmo de altura. Numerosos vecinos, con viviendas situadas en planta baja, se ocupaban de sacar el lodo que invadía todo el suelo de las casas y los enseres inutilizados por el agua.
Un viejo edificio de dos pisos había sido completamente derribado por la riada, y sus escombros invadían la calzada, aunque no han sido frecuentes, sin embargo, derrumbamientos similares.
Como en otras muchas localidades, la falta de luz eléctrica había impedido que se fabricase pan. Este alimento estaba siendo repartido ayer por los convoyes de víveres de forma racionada.
"Ayer, a las siete de la tarde, algunas calles estaban ya llenas de agua", indicaban dos muchachas de Algemesí, estudiantes de bachillerato y formación profesional, "aunque fue a medianoche cuando vino la avalancha más fuerte.
En esa población, unas dos mil personas fueron evacuadas a última hora de la tarde del miércoles de sus domicilios, en la parte donde había más peligro, y albergadas en los locales de la Caja Rural. No obstante, ayer por la mañana, la casi totalidad se había reintegrado a sus a sus domicilios y sólo quedaban algunos evacuados, de otros lugares a los que no podían regresar al encontrarse aislados por las aguas.
Desde Massalavés, otro de los puntos a los que se podía llegar por carretera, se divisaba el pueblo de Benimuslent, que había quedado aislado y cuyos habitantes pasaron la noche en los tejados de las casas. Sobre el mediodía de ayer, helicópteros del Ejército de Tierra comenzaron a rescatar a los vecinos.
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