La Prensa conservadora italiana afirma que el Vaticano no tiene deudas con el Banco Ambrosiano ni relación con su quiebra

De una parte de la curia romana siguen llegando a través de la Prensa mensajes filtrados en los que se insiste que el Vaticano no tendrá que pagar nada en el asunto Instituto Obras de Religión-Banco Ambrosiano. Al parecer, es esta la conclusión a la que han llegado los tres expertos internacionales convocados por el secretario de Estado, cardenal Agostino Casaroli, para que dieran su opinión de técnicos en el complejo problema de las posibles responsabilidades del banco del Papa en la quiebra de Roberto Calvi, del cual era uno de los mayores accionistas.

La primera noticia apareció en el semanario del movimiento católico integrista Comunión y liberación, el cual afirmó que los tres expertos habían concluido su investigación afirmando que, "técnicarnente", el IOR no es deudor del Banco Ambrosiano de Calvi. Y el comentario era: "Esto será un puñetazo en el estómago para muchos". Ayer, el segundo mensaje, en el diario conservador de Roma Il Tempo. Con mayor autoridad, el diario publicó en primera página, con gran relieve, "las conclusiones" de los tres banqueros resumidas en estos cinco puntos:

1. El IOR (Instituto Obras de Religión) no ha recibido, ni del grupo del Banco Ambrosiano, ni de Roberto Calvi, ninguna cantidad y, por tanto, nada debe restituir.

2. Las sociedades extranjeras adeudadas con el grupo del Banco Ambrosiano no han estado nunca gestionadas por el IOR, el cual no tuvo ningún conocimiento de las operaciones realizadas por las mismas.

3. Todos los préstamos efectuados por el grupo del Banco Ambrosiano a dichas sociedades fueron concedidos en fecha anterior a las llamadas cartas de aval que habría entregado el arzobispo Marzinkus a Calvi.

4. Estas, por su fecha de emisión, no han tenido ninguna influencia en dichos préstamos.

5. En caso de eventuales investigaciones, todo quedará comprobado.

Respuesta ambigua del Vaticano

Interrogado el portavoz del Papa, Romeo Panciroli, la respuesta ha sido muy ambigua: "Se trata", dijo literalmente, "de un informe o informes reservados al Secretario de Estado. Esta sala de Prensa vaticana no puede, pues, ni confirmar ni desmentir".Lo primero que salta a la vista es que no existe un documento único, ya que habla de informes, en plural. Por eso se piensa que cada uno de los expertos ha podido dar respuestas diferentes.

Por otra parte, las conclusiones de los tres expertos en el Vaticano no las ha visto absolutamente nadie, salvo el cardenal Casaroli, como fue ayer confirmado a EL PAIS en diversos medios romanos., Consultado telefónicarnente el secretario del IOR, De Bonis -el número dos después de Marcinkus-, respondió: "De secretaría de Estado, se nos ha prohibido terminantemente hablar con los periodistas". Y añadió que, de este asunto, ni siquiera ellos saben nada, ya que está todo en, manos del secretario de Estado.

¿Qué opinan las fuerzas políticas y diplomáticas italianas? Un portavoz del Ministerio del Tesoro afirmó que la información publicada ayer por Il Tempo no tiene ningún valor y que el Ministerio no ha recibido aún ningún informe oficial del Vaticano para poder entablar negociaciones. Y que, de cualquier modo, dichas informaciones están en plena contradicción con los informes que ellos tienen del Banco Central de Italia y que fueron expuestos los días pasados por el ministro Nino Andreatta ante el Parlamento.

Por su parte, también el Ministerio de Asuntos Exteriores confirmó ayer que nada oficial ha llegado a ellos de fuentes vaticanas y que todas las relaciones con el Vaticano se hacen a través de la Embajada italiana, es decir, por canales diplomáticos.

Las deudas existen

Nerio Nesi, presidente de Banca Nazionale del Lavoro, que hoy controla una parte del nuevo Banco Ambrosiano, consultado personalmente por EL PAÍS sobre las informaciones aparecidas en Il Tempo, ha respondido textualmente: "Mi respuesta es la misma que la del ministro del Tesoro ante el Parlamento, el democristiano y católico Nino Andreatta, que ha confirmado las cifras dadas por mí a EL PAÍS el domingo pasado sobre las deudas del IOR al Banco Ambrosiano".Y añadió que no tiene ninguna importancia que las cartas de aval dadas por el Vaticano a Roberto Calvi puedan tener fecha posterior a las operaciones hechas por Calvi con las sociedades consorciadas. Al revés, si acaso, agravan la responsabilidad.

Nesi, que ha sido de las pocas personas que ha podido leer las 53 cartas de aval firmadas por Marcinkus, afirma que en ellas Calvi se comprometía "a no usarlas contra el Vaticano".

Nesi concluyó diciendo: "Como ya había afirmado en mi anterior entrevista a EL PAÍS, repito que el Vaticano tendrá que pagar sus deudas al Ambrosiano y que serán indispensables negociaciones entre Italia y el Vaticano. Es increíble, después de lo que ha dicho ante el Parlamento el ministro del Tesoro, que se pueda afirmar que el IOR no tiene ninguna responsabilidad en la quiebra del Ambrosiano".