Los rechazados en Medicina de la Autónoma de Madrid, obligados a una nueva inscripción

Unos doscientos estudiantes aspirantes al ingreso en la Universidad Autónoma de Madrid, que hicieron su preinscripción en Medicina, tras aprobar el exámen de selectividad y no obtener plaza en dicha facultad, se encuentran en estos momentos pendientes de la apertura de un nuevo plazo de preinscripción, sin tampoco tener la menor seguridad de que vayan a obtener plaza en la carrera que elijan en esta ocasión.

Desde que se estableció el numerus clausus para el ingreso en las facultades de Medicina se ha venido observando el criterio de permitir que los alumnos que aspiran a entrar en una determinada universidad, rellenen un impreso de preinscripción en el momento de matricularse para las pruebas de acceso a la universidad o examen de selectividad. En dicho impreso el alumno venía obligado a señalar tres carreras estableciendo un orden de prelación. Teóricamente, este sistema permitía que los alumnos rechazados en Medicina, por no haber alcanzado una puntuación determinada, pudiesen cursar las carreras elegidas en segundo o en tercer lugar.Esta posibilidad ha dejado de ser realidad en la mayor parte de los casos en los últimos cursos, al producirse un desplazamiento de los alumnos rechazados en Medicina hacia carreras donde se cursan estudios afines, creándose así una matrícula falsa, compuesta por grandes contingentes de estudiantes que aspiran a pasarse a Medicina al finalizar los estudios de primero en Biológicas, Farmacia, Veterinaria o cualquier otra especialidad científica cuyo plan de estudios sea más o menos próximo al de la facultad de Medicina.

Para hacer frente a este problema, la Universidad Autónoma de Madrid ha suprimido las segundas y terceras opciones en el impreso de preinscripción. Al publicarse en estos; días la lista de los 250 alumnos admitidos en la facultad de Medicina, los que han quedado excluídos se encuentran en vísperas del comienzo de las clases, sin saber qué estudios podrán realizar.

Las autoridades académicas han anunciado que el próximo día 13 se abrirá un nuevo plazo de preinscripción y de, matrícula, pero ya se ha advertido a los interesados las escasas posibilidades que tienen de obtener plaza en secciones como Biológicas, cuyo claustro ha decidido este año, poner fin a los problemas de matrícula falsa aplicando también su particular numerus clausus. Hay que tener en cuenta que Biológicas, una de las divisiones que componen la facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma, padece, desde su creación, gravísimas deficiencias de instalaciones y de dotación de profesorado. Baste señalar que los casi 2.000 alumnos que componían la matrícula del curso pasado en esta división disponían de uno sólo de los quince módulos de que consta esta facultad y unos barracones prefabricados, cuya provisionalidad inicial ha tomado carta de naturaleza con el paso de los años.

En cualquier caso, la caótica regulación actual del acceso a los estudios universitarios origina cada año nuevos problemas que se van superponiendo sobre los antiguos. Así, parece haberse convertido en moneda corriente el que una décima de punto en la calificación del examen de selectividad determine la posibilidad de realizar o no la carrera que el estudiante desea hacer; que quienes se ven obligados a hacer una carrera que no eligieron comiencen inevitablemente el curso con uno y hasta con dos meses de retraso, como consecuencia de los cada día más complicados procesos de preinscripción, y, por último, que la duración de la carrera les cueste un año más, debido a la normativa que establece una reserva de plazas para los alumnos que, no habiendo-obtenido el acceso a Medicina a la primera, hayan realizado con buenas calificaciones y sin ningún suspenso el primer curso de alguna de las carreras afines.