Estreno de 'La fiesta del Madrid romántico', con el 'Tenorio' en verano
Por ser la obra más representativa del teatro romántico español, Don Juan Tenorio, de José Zorrilla, será la vedete de la fiesta veraniega de recreación del Madrid Romántico que ha escrito, montado y dirigido Antonio Guirau para el programa de festivales de teatro de verano del Ayuntamiento de Madrid, en colaboración con la Diputación Provincial. En el espectáculo, que se realizará desde hoy y durante todo el verano en la Plaza Mayor, de Madrid, se verá también una antología de la zarzuela de la época, y se podrá tomar algo en un café cantante, en presencia y compañía de todos los personajes que caracterizaron, de Larra a Bécquer, de Carolina Coronado a Espronceda, una época curiosa y exótica de nuestra cultura.
Según Antonio Guirau, creador del espectáculo La fiesta del Madrid romántico, la elección del Romanticismo para suceder al Madrid de los Austrias del verano pasado, se debe a "algo más que una moda. A nivel intelectual, es un movimiento que interesa mucho, y se han podido ver durante el año exposiciones muy interesantes sobre diversos aspectos del tema, además de que está apareciendo constantemente bibliografía sobre el mismo asunto. Por otra parte, los más jóvenes se llaman a sí mismos nuevos románticos...". En fin, que hay una especial sensibilidad hacia esta época en la que comenzó la modernidad.
Farsa y teatro
Esta sensibilidad es la que han tratado de reproducir, quizá por su lado más folklórico, en un espectáculo que intenta ser casi total. En una Plaza Mayor vallada con "un cerramiento especial de Javier Navarro, de modo que en ningún momento pierda su aspecto cotidiano aunque se vea convertida en un entorno muy particular", y por 350 pesetas, se han unido varios ambientes de farsa y teatro. Primero, los escenarios del Tenorio: desde la Hostería del Laurel, a la calle y la casa de Doña Ana de Pantoja, el público se va moviendo con los actores por los distintos escenarios realistas, cinematográficos, de esta obra que venía de la tradición y quiere ser casi una seña de identidad española. El convento de Doña Inés, la Quinta de Don Juan, el cementerio, la casa nueva de Sevilla... Y los versos de Zorrilla, en una versión a la que se le ha cortado casi una hora para que entre en el espectáculo."Hace mucho tiempo que no se representaba Don Juan Tenorio. Estoy seguro", dice Antonio Guirau, "de que hay muchos jóvenes que no lo han podido ver nunca... Por otra parte, hay otra osadía: la tradición es representarla en noviembre, el día de los difuntos. Nosotros la vamos a hacer en verano. Y por fin, el montaje mismo es osado, hace moverse a los espectadores por los distintos escenarios en que tiene que representarse la acción, y que están fijos, en vez de ir cambiando el decorado ante unos espectadores quietos".
Donde sí están quietos los espectadores es en el auditorium montado también en la Plaza Mayor, en el que se podrá ver la Antología de la Zarzuela Romántica, con una orquesta de cuarenta profesores, coros y solistas. Partes de Luisa Fernanda, La leyenda del beso, La calesera, Doña Francisquita, El barberillo de Lavapiés y Bohemios, irán pasando en un espectáculo que completa el Tenorio, y antes de que comience la tercera parte, tal vez la más divertida y espectacular.
"La parte que llamamos de fantasía y café cantante", dice Antonio Guirau: un café con su pianista y su tonadillera, que canta música de la época, y unos personajes que están en sus garitos o en sus mesas de café, y que son los hombres y mujeres de la época, los poetas sobre todo, los suicidas egregios, como Larra, las echadoras de cartas y leedoras de manos, los mágicos hipnotizadores, los petimetres, las poetisas, los que se enfrentan en un duelo a pistola.
Por supuesto, dice Antonio Guirau, "los espectadores están invitados a lucir sus ropas románticas" para que esa fusión de público y figurantes sea más perfecta.
Babelia
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