Israel pretende facilitar la creación de un Consejo de Salvación Nacional

En Israel se despreocupan de las amenazas de intervención directa de la Unión Soviética en la guerra de Líbano. Sin embargo, las unidades blindadas de¡ Estado hebreo se retiraron ayer del barrio de Baabda, en Beirut, lo que quiere decir que ya no están en las proximidades de¡ palacio presidencial libanés. Esta retirada tiene como finalidad facilitar la tarea de¡ presidente libanés, Elías Sarkis, para constituir un Consejo de Salvación Nacional que pretende reunir a todas las facciones con el objetivo de lograr la reconciliación y la reconstrucción de Líbano.

Walid Jumblatt, líder de la izquier da libanesa, se ha negado a partici par en este Consejo porque "se reunirá a la sombra de los tanques israelíes".Las fuerzas israelíes retiradas de Baabda han sido enviadas a reforzar el cerco que rodea a los pa lestinos en Burj el Brayana, en el sector occidental de Beirut.

Cabe plantearse si la retirada is raelí en ese sector crucial no está relacionada con la amenaza soviética de intervenir si los isralíes si guen atacando Beirut. Ante este interrogante, los círculos oficiales israelíes se encogen de hombros, si no con desprecio, al menos con despreocupación.

En estos círculos consideran que la decisión soviética de enviar barcos de guerra a la zona "no es más que una maniobra que, por un lado, trata de impresionarnos y que, por otro, intenta mejorar la imagen de Moscú ante los árabes. No nos preocupa especialmente esta demostración de fuerza por parte de los soviéticos".

La explicación de esta despreocupación radica en que los soviéticos no son los únicos que han reforzado su presencia en la zona. La VI Flota de Estados Unidos patrulla cerca de las aguas libanesas e Israel no teme una amenaza cuya materialización tendría que tener en cuenta la eventualidad de un enfrentamiento global con Éstados Unidos.

Expertos militares israelies subrayan que "los soviéticos han reaccionado demasiado tarde, cuando todo está prácticamente terminado". Estas mismas fuentes añaden que "Israel no ha tenido nunca la intención de franquear la frontera siria, ni deacupar Beirut. Ariel Sharon puede ser cualquier cosa menos un imbécil. Sabe muy bien que atacar la capital es como meter la cabeza en la boca del lobo".

Los mismos expertos militares indican que los resultados de una operación de este estilo pueden ser desastrosos interna e internacionalmente. En el terreno interno, unas pérdidas elevadas por parte de Israel podrían costar las próximas elecciones al primer ministro israelí, Menájem Beguin, y a su partido el Likud. En el campo internacional, el Estado hebreo se vería aislado inmediatamente y perdería los pocos amigos que le quedan. En este sentido hay que tener en. cuenta la advertencia del presidente de Francia, François Mitterrand, al ministro de Asuntos Exteriores judío, Itzhak Shamir, que actualmente visita París.